Algunos datos curiosos sobre el tabaco
Hasta la llegada de la I Guerra Mundial estaba mal visto que las mujeres fumasen; hacerlo era “cosa de hombres”
En el año 2020 se realizó la Encuesta Europea de Salud en España que arrojó el siguiente resultado: el 23,3% de los hombres y el 16,4% de las mujeres fuman todos los días. Dicho de otra manera, uno de cada cinco españoles fuma a diario.
Queda claro que el tabaco es un producto muy presente en la sociedad española, a pesar de ser nocivo para la salud. En este artículo vamos a aportar una serie de datos sobre el tabaco que quizás desconocías.
El tabaco no solo se fuma
Además de en cigarrillos industriales y de los preparados de manera manual con papel de liar, hay varias formas de consumir tabaco:
- El rapé es tabaco en polvo que se tomaba esnifado a través de la nariz. A este tipo de tabaco es al que le debemos que exista la expresión “empolvarse la nariz”, ya que los consumidores se retiraban a otra estancia para esnifar el polvo del tabaco.
- El tabaco de mascar es una gran opción para evitar inhalar las sustancias tóxicas que surgen de la combustión. El cine de Hollywood lo convirtió en un icono del cine western.
Una costumbre masculina
Hasta la llegada de la I Guerra Mundial estaba mal visto que las mujeres fumasen; hacerlo era “cosa de hombres”. Con la llegada del conflicto bélico, la gran mayoría de los hombres parte al frente y las mujeres deben hacer frente a las tareas y trabajos que hasta entonces estaban destinadas a sus maridos y familiares. Al cambiar esta “costumbre”, también dan pasos en otras direcciones en busca de la igualdad. Comenzar a fumar fue otro de esos pasos “igualitarios”.
El tabaco contribuyó a definir la moda
Puesto que siglos atrás la población no disponía de agua corriente ni de duchas, la higiene personal era más complicada que en la actualidad. Uno de los inconvenientes del tabaco es el fuerte olor que deja en la ropa, el pelo, las manos… la solución que encontraron los antiguos fumadores para combatir su olor fue utilizar sombreros, guantes y chaquetas, de modo que el humo se quedase en estas prendas y complementos. Es de ahí de donde viene el término esmoquin (smoking en inglés, que en castellano significa fumar). Como ves, el tabaquismo influyó de manera decisiva en la moda.
El tabaco otro ejemplo de la fuerza de Hollywood
En España y otros cuantos países está prohibido hacer publicidad relacionada con el tabaco, pero no siempre fue así. Mucho antes de que la prohibición de la publicidad de este producto entrase en vigor, la industria tabacalera lanzó numerosas y efectivas campañas para atraer a la población hacia los cigarros. Esta publicidad asociaba el consumo de tabaco a las personas de éxito, atractivas y con mucho poder. Y, como no podía ser de otra manera, tuvieron su principal representación en los actores y actrices de Hollywood, modelo de referencia para millones de personas en todo el mundo que anhelaban parecerse a sus estrellas favoritas. Fumar era sinónimo de felicidad, de estatus social, de elegancia y de distinción y a eso “aspiraban” los fumadores.