La vigilancia del Alcalde: el extraño caso de las piscinas municipales
Llevamos medio mes del actual año comprobando diariamente como vela el Ayuntamiento por los intereses de los salmantinos. La actitud vigilante de nuestro alcalde, que no vio el parón en las obras del Hospital Clínico o el recorte brutal de su plantilla, hasta ahora tampoco parece observar que alguien incumpla las normas en un servicio municipal: las piscinas. Servicio que ha cambiado de empresa concesionara, mero intermediario lucrativo. Como estreno la verdad que no está nada mal, inspira una enorme confianza esa nueva empresa.
Según la ley, los precios de los servicios públicos municipales los fija el Ayuntamiento y entran en vigor tras ser publicados en el Boletín Oficial de la Provincia. Es decir, el argumento de que es una empresa nueva no sirve, además de insultar a la inteligencia de los ciudadanos, el servicio municipal siempre es el mismo independientemente del modelo de gestión que tenga.
En la actualidad están abiertas las piscinas cubiertas. Si uno visita el Boletín Oficial de la provincia del martes 16 de Diciembre de 2014 que establece los precios para 2015, se pueden ver los referentes a las piscinas municipales (Ordenaza Fiscal 51, página 68), incluidos por ejemplo bonos para 10 ó 20 baños (ideales para las personas que no puedan acudir todos los días a las piscinas), y donde no figura ninguna cuota de inscripción de 35 ?. En realidad el Boletín no tiene nada que ver con lo que oferta la empresa, ¿con la aquiescencia municipal? Si observamos la página web del OAGER vemos los mismos precios que en el Boletín (no puede ser de otra manera).
Pero si analizamos la parca información facilitada por la nueva empresa concesionaria, desde luego inexistente a fecha de hoy en Internet (por cierto, la propia web municipal en el apartado de las piscinas de repente está en construcción), los precios ofertados son distintos a los del Boletín Oficial de la Provincia. Llevan así 15 días y la vista de águila del Alcalde y su equipo no lo ha notado todavía, quizás cegados por arreglarles los problemas a un parece que muy querido centro comercial. Al menos la oposición si está atenta, lo cual es de agradecer.
De hecho el papel informativo ni siquiera recuerda que los bonos allí detallados son mensuales. Han desaparecido, además de los mencionados con anterioridad, todos aquellos que superen la duración de un mes, a pesar de estar vigentes según el Boletín Oficial de la Provincia. Aparte de obligar a cambiar de tarjeta para acceder al recinto, que cuesta 2'48 euros, cuando el mecanismo de acceso sigue siendo el mismo, sin olvidar la cuota de inscripción mencionada. Estamos ante una subida encubierta de precios que, decía el Alcalde, no ocurriría este año (tras la deflación del pasado).
He manifestado con frecuencia que no entiendo la necesidad de introducir a un agente innecesario, como una empresa concesionaria en un servicio público, que lo único que hace es encarecerlo. Al menos hasta el momento las empresas no son ONG's y su fin último es ganar dinero. Dinero que podríamos ahorrarnos, más en tiempos de crisis, y dedicarlos a otros menesteres si el Ayuntamiento gestionara directamente sus responsabilidades. Pero la culpa no es de los munícipes gobernantes, sino de aquellos que los han puesto ahí, es decir, sus votantes. ¿Cuánto dinero público ganado con el sudor de la menguante clase media y pobres de nuestro país tenemos que seguir malgastando en cosas como estas para llenar los bolsillos de algunos? En Mayo tendremos un buen momento para que los electores respondan a preguntas como estas. El Ayuntamiento supongo que seguirá igual de vigilante que hasta ahora, y corregirá este entuerto, que es motivo suficiente para retirar la concesión, sería de agradecer que los tribunales no tuvieran que intervenir.
OAGER (Ordenanza fiscal 51):
http://www.oager.com/oficinavirtual/informacioncontribuyente/ordenanzasfiscales.aspx#
Folleto de la empresa concesionaria.
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