Futbolistas con 140 centímetros de altura, o menos...
El fútbol es un deporte en el que, al contrario del baloncesto, balonmano, rugby u otros deportes, no priva la condición atlética para poder jugar, incluso destacar. De hecho, grandes figuras del fútbol mundial como Pelé, Maradona o Messi, son jugadores de una estatura media que, incluso, no sobrepasan los 170 centímetros algunos de ellos. Bien es cierto que, a diario, en todos los procesos de reclutamiento y selección, muchos futbolistas jóvenes son despreciados, simplemente porque "miden poco", porque "son bajos", por debajo de 160 centímetros ya empiezan a ser "dudosos" en su generalidad. El propio Messi, siendo niño, tuvo que tratarse hormonalmente para superar un déficit de crecimiento temporal que fue costeado generosamente por el Barcelona Club de Fútbol.
En Brasil existe un equipo, "Gigantes del Norte", 
que llega a ser el mejor de aquel país en la categoría de "enanos". Allí, semana a semana, una veintena de jugadores desafía a otros equipos para hacerse visibles, siendo la figura del equipo Casemiro Roberto, de 27 años, más bien conocido por Wagner Love por su parecido físico con el delantero profesional brasileño, también por sus goles. El fondo de toda esta cuestión es que dichos jugadores sufren de "enanismo" aunque jueguen en el "Gigantes". Las pautas mínimas para seleccionar los futbolistas de este equipo fijan que los jugadores deben medir menos de 1,40 metros.
En general, las Reglas del juego entre futbolistas enanos son las mismas que en el fútbol ordinario, se contempla alguna excepción que produce sonrisas como la de que en los tiros libres en contra se puedan subir unos encima de otros, "a caballito", intentando formar barreras más sólidas y elevadas para evitar goles en las faltas próximas al área de penalti. Los entrenadores aseguran que muchos de ellos hubieran sido profesionales de no haber sufrido la citada enfermedad de "enanismo". Por otra parte, se conoció el caso específico de Diego Serpentini que debutó en la "Prenovena de Everton de la Plata" que, con 14 años, cumplió su sueño de jugar en una cancha de 11. Dieguito padece "acondroplasia", enfermedad genética que produce "enanismo". Después de tiempo obtuvo un permiso especial para poder practicar formalmente en un equipo organizado. Volviendo a los "Gigantes del Norte", juegan en Belém, estado de Pará, al norte de Brasil, y allí hacen sus demostraciones futbolísticas. Hasta se muestran vídeos en "youtube" mostrando sus potencialidades aunque el objetivo fundamental es una llamada de atención sobre la enfermedad del "enanismo"?
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