Los vehículos recuperan la libertad de movimientos al llegar a la Plaza Mayor

El lluvioso arranque del mes de septiembre ha traído el habitual cambio en la normativa reguladora de la circulación y estacionamiento de vehículos en la Plaza Mayor de Ciudad Rodrigo, después de que en los dos últimos meses hayan tenido prohibido aparcar en el ágora (salvo los vehículos de carga y descarga en los horarios marcados para ello) e incluso la libre circulación, debiendo limitarse a cruzar de Julián Sánchez (la única vía legal para llegar a la Plaza) a Sánchez Arjona (aunque hay muchos conductores que se han saltado la prohibición a lo largo del verano).

A partir de este 1 de septiembre, los vehículos recuperan la libertad de movimientos en la Plaza, de tal modo que cuando lleguen a la misma por Julián Sánchez podrán girar en el centro hacia la izquierda (en dirección a la Rúa del Sol) o hacia la derecha (en dirección a la Colada o Cardenal Pacheco), además obviamente de seguir teniendo la opción de seguir hacia adelante por Sánchez Arjona. Por el momento, se seguirá sin poder llegar a la Plaza por la calle San Juan, ya que hay colocados unos bolardos al inicio de la vía producto de la terraza que hay en ella.

Junto a la libertad de circulación, los vehículos recuperan a partir de este miércoles la posibilidad de aparcar en la Plaza, aunque por el momento sólo en horario comercial, es decir, de lunes a viernes de 8.00 a 20.00 horas y los sábados de 8.00 a 14.30 horas. Esta normativa sobre el aparcamiento estará vigente hasta el 15 de septiembre. Tras esa fecha, se podrá en cualquier momento del día (salvo los sábados por la tarde y los domingos como es tradición).

Todas estas novedades en la normativa de circulación y aparcamiento en el ágora que trae el mes de septiembre ya han sido señalizadas en la Plaza Mayor, sustituyendo los carteles y señales que ha habido durante los meses de julio y agosto y colocando los apropiados para esta primera quincena del mes. El estreno de la nueva normativa se produjo en una mañana marcada en el tramo inicial por la lluvia, que cesó en el tramo final, lo que hizo que todavía se viese algo de movimiento por las calles, incluido por parte de algunos turistas.