Salamanca registra un centenar de denuncias por desaparición de personas, 21 durante el primer...

Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad registraron en 2020 un centenar de denuncias por desaparición de personas en Salamanca (101), de las que 21 se produjeron durante el primer estado de alarma (entre marzo y mayo), según los datos del Sistema de Personas Desaparecidas y Restos Humanos sin Identificar (PDyRH) del Ministerio del Interior. Al concluir el año permanecían activas 22 denuncias de personas desaparecidas. En el conjunto de Castilla y León las denuncias por desaparición de personas ascendieron a 954 durante el pasado año. La mayoría de las desapariciones son voluntarias (el 89% en el conjunto de España), y en cuanto a la duración, la mayoría se resuelve en las primeras 48 horas o en los 14 días siguientes a la desaparición.

Estos datos están recogidos en el Informe Anual elaborado por el Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES) del Ministerio del Interior, publicado esta semana, y en el que se subraya que 2020, un año marcado por la pandemia del coronavirus, también ha tenido un impacto directo en la evolución del problema de las desapariciones de personas, disminuyendo notablemente los casos, sobre todo entre marzo y junio, duración del primer estado de alarma, periodo en el que menos denuncias se registraron de toda la década. Durante el primer estado de alarma en Salamanca se registraron 21 denuncias de desapariciones de personas, cifra que en Castilla y León alcanzó las 132.

¿Cuándo se considera que una persona está desaparecida? En términos generales, es la persona ausente de su residencia habitual sin motivo conocido o aparente, cuya existencia es motivo de inquietud o bien que su nueva residencia se ignora, dando lugar a la búsqueda en el interés de su propia seguridad y sobre la base del interés familiar o social. La denuncia se mantiene activa mientras la persona no sea localizada o se desconozca cuál es la situación en la que se encuentra por parte de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad.

Desde su creación en junio de 2009, y hasta el 31 de diciembre de 2020, el el Sistema de Personas Desaparecidas y Restos Humanos sin identificar (PDyRH) acumula 219.425 denuncias sobre desapariciones, de las que permanecen activas 4.685. Esto supone una reducción del 15% con respecto a 2019. El principal motivo de este descenso se debe a que durante el año 2020 se ha continuado con el cese de denuncias interpuestas con anterioridad, y además el número de nuevos hechos denunciados ha sido notablemente inferior al de años anteriores. En este sentido, en 2020 se han registrado 16.528 denuncias, lo que supone un descenso del 37% con respecto a las denuncias registradas en 2019.

Finalizado el primer periodo del Estado de alarma, durante los meses de verano, el número de denuncias por desaparición se incrementó con respecto a meses precedentes.

El 89% del total de las denuncias sobre desapariciones en el año 2020 en España están catalogadas como voluntarias, y el grupo de edad más significativo es el de los jóvenes de 13 a 17 años, los cuales acumulan el 67% de los casos. También se han analizado los episodios de reincidencia, ya que este tipo de desapariciones son bastante frecuentes. Más de un 41% de las denuncias registradas en 2020 corresponde a estas personas, con una estimación media en su edad de 20 años. Menos del 1% son desapariciones con indicios de criminalidad.

Las Palmas (2.060), Madrid (1.813) y Barcelona (1.267) son las provincias con mayor número de casos de personas desaparecidas.

Perfil de la persona desaparecida

Por primera vez, el informe estadístico del Centro Nacional de Desaparecidos (CNDES) incluye un perfil de la persona desaparecida. Durante el pasado año, el desaparecido tipo fue un ciudadano español (el 68% sobre un total que incluye 107 nacionalidades distintas), que en el 89% de las ocasiones se ausenta de manera voluntaria. En el 60% de los casos se trató de un varón de entre 13 y 17 años. Este perfil es muy similar al que reflejan las estadísticas de los años precedentes.