Isabel Amor Palomero, cien años simpatizando con la justicia desde la libertad

Isabel Amor Palomero cumplió el viernes cien años rodeada del amor de sus seres más queridos. Recibió también el homenaje del Ayuntamiento de Villoria.

Isabel Amor Palomero es una mujer entrañable, muy querida y respetada en su pueblo, donde se dirigen a ella como "señora Isabel", y sobre todo por sus familiares que la premian con abundantes gestos de cariño. Pese a ellos este año está sufriendo el tener que mantener distancia con esos seres queridos con los que no está conviviendo en el mismo hogar. En su primer apellido lleva la palabra que puede definir el ambiente que se respira a su alrededor. La lozanía de la juventud se va sustituyendo en ella por un derroche de expresividad manifiesta. Llegar al siglo de vida es todo un logro, sobre todo después de haber trabajado tanto para criar once hijos. Eso sí, la familia siempre ha estado unida, como destaca su hija Pilar Calvo, quien añade que también salieron adelante gracias a sus hermanos mayores.

Sus hijos son: Pepe, Goyo (que falleció hace unos años), Clemente, Dioni, María Isabel, Pilar, Francisco, Carmen, Jesús, Ángel y Juan Carlos.

La familia Calvo Amor también son conocidos carpinteros, un abuelo a parte de otros trabajos ejercía el que consistía en reparar aquellos carros con ruedas de madera. La profesión, la heredaron de su padre, José Calvo, quien además tocaba la trompeta y llegó a conformar una agrupación musical con sus hijos.

- Su nieta Chole Sanz Calvo anota que a la familia de su abuelo les conocían como Carretero o Carretas y que a la de su abuela les conocían como Macarenos "porque son morenitos como la Virgen". -

Isabel Amor tiene 26 nietos y 19 bisnietos que disfruta cuando la visitan, la saludan o felicitan y con los cuales ha recibido cada alegría de su vida, con tanta intensidad como cada uno de ellos. Su hija Pilar destaca que "tenía un marido" con el que compartía que "les gustaba vivir", es decir disfrutar de los momentos felices, por ejemplo cuando iban al cine de Villoria, se llevaban a todos los hijos, después con sus nietos y otros recuerdos que nunca se borraran de la memoria de los suyos.

Su casita se encuentra en la zona antigua de Villoria, entre la calle Eras y la calle Nueva, no obstante a veces vive donde sus tres hijas, que son las que ahora están siempre a su lado, aunque "hemos estado todos con ella", subraya su hija Pilar.

Es la mayor de sus hermanos, entre los que se encuentran Manuel, Sagrario, Francisco, Pepe, Luisa y Dionisio.

Algunas de las aficiones de Isabel Amor es escoger legumbres, no obstante, en su vida se puede destacar su hábito de lectura y su correcta escritura "sin una falta de ortografía", presume su hija. Una de sus materia favoritas era la geografía, muestra de ello es su capacidad para recordar todas las capitales de Europa y su situación en el mapa, nombres de ríos, y otros accidentes geográficos.

Su nieta Cristina Calvo le muestra el móvil, donde reconoce a todos sus seres queridos incluso en fotos de tiempos remotos. Como abuela y bisabuela para los suyos todo son elogios y facilidades. Aunque nunca fue mujer de poner dificultades ni castigos. Ella siempre ha sido defensora de la libertad y sobre todo de la justicia. No se la ponía nada por medio, "si tenía que dar la cara la daba y si tenía que escribir alguien le escribía", anota su hija Pilar Calvo.

Isabel Amor es una persona sabia e inteligente. Ella y su esposo nunca ocultaron a sus hijos ninguna parte del pasado ni la historia que atesoran cien años de una fructífera vida en Villoria.