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Subastado por 1,8 millones de euros en París un cuadro desconocido del pintor español José de...
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primer seguidor del italiano Caravaggio

Subastado por 1,8 millones de euros en París un cuadro desconocido del pintor español José de...

Actualizado 17/06/2020
EP

Pese a la crisis sanitaria del coronavirus, la existencia de esta obra provocó el interés de numerosos coleccionistas

La casa de subastas Daguerre ha informado de la venta del cuadro 'Un filósofo: el feliz geómetra' del pintor español José de Ribera, tras ser adquirido por una galería de arte sueca por más de 1,8 millones de euros. La obra original del artista multiplicó por seis su estimación inicial, valorada en 300.000 euros.

Según informa la casa de subastas en un comunicado, el lienzo fue pintado por Ribera entre los años 1610 y 1615 y se ha considerado al "colorido retrato" como "la obra más importante de la juventud del artista". El cuadro fue descubierto en una casa de la región francesa de Bretaña, donde se mantuvo desde mediados del siglo XIX.

Pese a la crisis sanitaria del coronavirus, la existencia de esta obra provocó el interés de numerosos coleccionistas que, a través de las herramientas digitales, observaron la pintura. "Este hermoso resultado confirma el dinamismo del antiguo mercado de pinturas, que se ha intensificado durante los dos últimos años", ha detallado Stéphane Pinta, experto de la firma Turquin.

El artista, considerado como el primer seguidor del italiano Caravaggio, ofrece en este óleo sobre lienzo "una imagen fuerte y encarnada de su modelo favorito, que representaría en otras seis pinturas", informa la nota.

En este sentido, Pinta ha destacado que la identidad del hombre representado podría ser del geómetra y astrónomo griego Apolonio, "gran figura de las matemáticas helenísticas". "Lejos de las representaciones estereotipadas de los grandes pensadores de la Antigüedad, con sus barbas blancas y su noble apariencia, el artista prefiere representar a un viejo arrugado, vestido con harapos para encarnar el conocimiento. Una provocación subrayada por la sonrisa maliciosa del personaje", ha explicado el experto de Turquin.

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