“Estamos acostumbrados a situaciones difíciles, pero nadie estaba preparado para lo que llegó,...

Luis Ángel González Fernández, director gerente del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca, ha publicado una carta de agradecimiento a la plantilla por su "trabajo, el esfuerzo, el compromiso y el sacrificio" durante la crisis del coronavirus.

A la hora de revisar lo sucedido, reconoce que "los profesionales de la Salud estamos acostumbrados a afrontar situaciones difíciles y adversas, pero nadie estaba preparado para lo que llegó, ni profesional ni emocionalmente".

En este sentido, añadía que "ha sido prácticamente imposible no sentir miedo y preocupación en algún momento, con situaciones de máxima tensión en las que se llegaron a atender al mismo tiempo a más de 570 pacientes ingresados por COVID-19"

CARTA DE AGRADECIMIENTO DEL EQUIPO DIRECTIVO DEL COMPLEJO ASISTENCIAL UNIVERSITARIO DE SALAMANCA

Es necesario comenzar esta carta diciendo que todos los profesionales que formamos parte del Equipo Directivo del Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA), deseamos manifestar nuestro más sincero pésame y condolencias a los familiares y amigos de todas las personas que han fallecido a raíz de la COVID-19, o por otras razones, en esta época de emergencia sanitaria y en especial a las de todos aquellos profesionales sanitarios que han perdido su vida como consecuencia de esta terrible pandemia.

La dimensión de esta crisis ha sido tan importante que todos nosotros, de una forma u otra, hemos vivido de cerca la pérdida, el dolor y la falta de consuelo de tantas y tantas personas, así como la soledad y la resignación en su despedida. Para todos ellos, mis primeras palabras.

Como Gerente, en representación del equipo responsable de la gestión de esta crisis sanitaria internacional en el CAUSA, estoy muy agradecido y orgulloso por el trabajo, el esfuerzo, el compromiso y el sacrificio de todos los trabajadores de cada una de las categorías que forman este complejo hospitalario, en cada uno de sus ámbitos.

Siempre hemos sido conscientes de que, dado el estado de nuestras infraestructuras asistenciales, el capital humano sería, junto con la enorme responsabilidad de la ciudadanía, nuestro valor fundamental a la hora de afrontar esta compleja situación. Ambas certezas se han visto confirmadas día a día. El personal sanitario y todos los que con su ayuda han colaborado en esta crisis, cada uno de ellos ha demostrado con creces su gran labor, su calidad en la asistencia y su enorme capacidad de adaptación en una situación tan grave, incierta e inestable.

Los profesionales de la Salud estamos acostumbrados a afrontar situaciones difíciles y adversas, pero nadie estaba preparado para lo que llegó, ni profesional ni emocionalmente. Ha sido prácticamente imposible no sentir miedo y preocupación en algún momento, puesto que se han vivido situaciones de máxima tensión en las que se llegaron a atender al mismo tiempo a más de 570 pacientes ingresados por COVID-19 en dos hospitales y un recurso socio-sanitario.

Esta situación ha implicado un aumento exponencial de nuestra capacidad asistencial y ha precisado una cantidad ingente de recursos humanos, de equipos, y de material sanitario, en un momento de desabastecimiento a nivel global, condicionando situaciones que se han tenido que abordar con la limitación de los recursos disponibles.

En los hospitales hemos visto trabajar como un verdadero equipo a todos los profesionales ligados a las tareas asistenciales de pacientes en situación crítica, tanto de Medicina Intensiva, Anestesiología y Reanimación, Pediatría y Cardiología, tejiendo una red que fue capaz de cuadruplicar los puestos de críticos gracias a la iniciativa y generosidad de muchos (Bloque Quirúrgico, Endoscopias, etc.) que cedieron sus espacios para hacer frente a la compleja situación.

Urgencias ha demostrado una capacidad de adaptación constante, asumiendo cambios en sus espacios de trabajo, siendo pioneros en la creación de un doble circuito para asistir de forma específica a los pacientes COVID-19, con una presión asistencial inédita que ha condicionado momentos críticos. Grandes profesionales implicados con su vocación, y con sus pacientes, ante el peor escenario posible.

Desde el primer momento, en las unidades de hospitalización, los neumólogos, pediatras, cardiólogos, dermatólogos, alergólogos, etc., así como facultativos y residentes, formaron Equipos Covid liderados por Medicina Interna, en los que se fueron integrando especialistas de todos los servicios médicos y quirúrgicos; voluntarios que no dudaron un segundo en unirse a sus compañeros en esta batalla. Así como enfermeras, TCAE's, fisioterapeutas, celadores, personal de limpieza? todos ellos han trabajado sin descanso en una situación muy difícil. Medicina Preventiva, Salud Laboral, Análisis Clínicos, Microbiología, Radiología, Farmacia? han sido servicios fundamentales para el diagnóstico y tratamiento, enfrentándose a una presión asistencial sin precedentes y respondiendo de forma encomiable. Trabajadores de los servicios de Admisión, Recursos Humanos, Logística, Atención al Paciente, Hostelería, Mantenimiento, Informática, Comunicación, Delegados Sindicales, Seguridad, y muchos otros que sería imposible enumerar, han dado lo mejor de ellos mismos.

Para este Gerente y todo su Equipo Directivo, la labor que han realizado y realizan los profesionales, en una situación inédita donde la toma de decisiones es complicada en muchas ocasiones, ha sido y está siendo excepcional. Su capacidad de trabajo, buena práctica, dedicación y compromiso con los pacientes y sus familiares ha destacado en todo momento. Han tenido nuestra entera confianza y apoyo; les aseguro que la seguirán teniendo siempre que las circunstancias así lo exijan.

Una de las decisiones más difíciles que hubo que tomar fue limitar y restringir los acompañamientos, pero era prioritario contener y evitar los contagios. Una medida que ha impedido a muchas personas despedirse de sus seres queridos y acompañarlos en el final de su vida. En esta terrible situación, hemos intentado aliviar la soledad del enfermo y la incertidumbre de sus familiares a través de las medidas del Plan de Humanización.

Nos solidarizamos con quienes se hayan visto afectados por este triste contexto, necesario para su seguridad. La responsabilidad y solidaridad de la población ha sido ejemplar. Muchísimas personas, empresas, establecimientos hosteleros, pequeños comercios, asociaciones, colectivos, instituciones públicas y privadas? han realizado multitud de donaciones y colaboraciones de todo tipo.

En especial queremos destacar a la Universidad de Salamanca, que desde el primer momento nos brindó todo su apoyo, siendo el Colegio Arzobispo Fonseca uno de nuestros recursos socio-sanitarios utilizados para pacientes Covid. Desde aquí aprovecho para darles a todos las gracias.

Finalmente, reiterar nuestro agradecimiento a toda la ciudadanía, que ha demostrado su compromiso con la emergencia, cumpliendo con las medidas de confinamiento y facilitando nuestra labor, gracias al uso responsable de los recursos sanitarios; pero relajarnos ahora podría propiciar un gran rebrote que sería dramático para todos. Tenemos que ser conscientes de que la batalla ante el virus todavía no ha terminado.

Luis Ángel González Fernández, DIRECTOR GERENTE COMPLEJO ASISTENCIAL UNIVERSITARIO DE SALAMANCA