Además habrá aplazamientos y fraccionamientos para los que, por ejemplo, hayan sufrido la pérdida de miembros de la familia
El organismo de Recaudación y Gestión Tributaria de la Diputación de Salamanca (Regtsa) ha anunciado nuevas medidas, a raíz del parón económico producido por la crisis del coronavirus, en torno al cumplimiento voluntario de las obligaciones tributarias. En este sentido, Regtsa ha comunicado nuevos plazos de pago del segundo período de cobro, que se unen a las ampliaciones que ya se hicieron del primer período.
Por un lado, se retrasa hasta el mes de mayo el inicio del segundo período de cobro, ampliándose además el plazo para abonar los recibos de 2 a 3 meses. De este modo, el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica se podrá pagar de forma voluntaria del 4 de mayo al 31 de julio, mientras que el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) en pago único se podrá abonar del 1 de junio al 31 de agosto. En lo que respecta al 2º plazo de pago del IBI (en aquellos ayuntamientos que lo tienen fraccionado) y el Impuesto de Actividades Económicas, se podrá pagar del 1 de septiembre al 30 de noviembre.
Por otro lado, Regtsa ha decidido poner en marcha un sistema de aplazamiento y fraccionamiento exprés, en el período de pago voluntario, para los contribuyentes que formen parte de empresas que hayan cesado su actividad durante el estado de alarma, para los empleados incluidos en algún Expediente de Regulación Temporal de Empleo, y para las unidades familiares que hayan sufrido la pérdida de algún miembro por culpa del coronavirus.
Para agilizar la tramitación de los aplazamientos o fraccionamientos, solamente serán necesarias una declaración responsable de encontrarse en alguno de esos supuestos, y la domiciliación bancaria de los pagos.