Un año más se agotaron los pañuelos farinatos disponibles mucho antes de que pasasen por el Registro todos los que acudieron al acto
La gran mayoría se enterará al leer estas líneas, pero el Carnaval del Toro 2020 tuvo un inicio ligerísimamente retardado, por culpa de las ganas que tenían los mirobrigenses de que empezasen oficialmente las fiestas. El caso es que un amplio número de mirobrigenses se fue concentrando en el Registro un buen rato antes de la hora fijada por la Asociación Cultural Carnavaldeltoro.es para empezar a repartir los pañuelos farinatos del Campanazo.
Cuando llegaron los propios miembros de la Asociación al Registro, vieron que el público estaba demasiado encima de los puntos de reparto de los pañuelos farinatos, por lo que se les exhortó a que se echasen para atrás. Algunas personas lo entendieron sin problemas, pero hubo otras cuantas que no estuvieron por la labor, a lo que tampoco ayudaba que había ido llegando más gente al Registro (finalmente se optó por bloquear temporalmente la entrada a ese espacio).
Ante esta situación, se requirió incluso de la presencia de la Policía Local, para asegurar que el inicio del reparto se producía sin problemas. Finalmente, las aguas llegaron a su cauce y se consiguió poner todo en orden para empezar con seguridad el reparto de miles y miles de pañuelos farinatos, que un año más volaron, de tal modo que unas cuantas personas que aparecieron por el Registro en su busca ya se quedaron sin él.
Todo el público tenía como destino la Plaza Mayor a través de la calle Madrid, donde se formó el clásico tapón, que se complicó aún más debido al lanzamiento de alguna que otra bomba de humo. El momento principal de ese camino hacia el ágora lo marcaron como siempre las charangas, que este año fueron protagonistas por partida doble en el Campanazo: no sólo lo animaron musicalmente, sino que fueron incluso los encargados de dar el primer Campanazo, al haber sido distinguidos por Carnavaldeltoro.es con el Reloj Suelto.
De este modo, en representación de las charangas de ayer y hoy, subieron a lo alto de la Casa Consistorial José Luis Benito y Manolo Burgos, ofreciendo un espectáculo adicional, ya que el primero de ellos se arrancó a cantar una canción para olvidar las penas y disfrutar del Carnaval. Ese primer Campanazo fue dado este año con mucha puntualidad respecto a la hora anunciada para ello, las 18.15 horas (otros años se dio con algo de antelación).
De forma previa a ese Campanazo (presentado como siempre por la periodista Rebeca Jerez), hubo un momento especial en la Plaza Mayor, con la realización de un gesto (con el pañuelo farinato anudado en la muñeca y un gesto rockero con los dedos) de rechazo a la violencia de género, mientras se gritaba 'No es No'.