Por qué todo el mundo habla del CBD
Los muchos beneficios que, desde el punto de vista científico, industrial o médico, ofrece el cultivo de esta planta hacen que se replanteen las leyes que en estos momentos están impidiendo que mucha gente se vea beneficiada de sus efectos terapéuticos, l
El CBD, aceite de cannabis o cannabidiol, vuelve a la palestra de los noticiarios de la mano del grupo parlamentario de Unidas Podemos que reabre el debate sobre su uso y legalización
De forma periódica, desde diferentes estamentos políticos, empresarios, de la salud o medioambientales se vuelve una y otra vez a intentar cambiar las leyes prohibicionistas que existen en España a propósito del cultivo, uso, y consumo de los productos que ofrece la planta de la marihuana.
Los muchos beneficios que, desde el punto de vista científico, industrial o médico, ofrece el cultivo de esta planta hacen que se replanteen las leyes que en estos momentos están impidiendo que mucha gente se vea beneficiada de sus efectos terapéuticos, la creación de empleo o del uso como materia prima para papel o tejidos, entre otros muchos.
El CBD como elemento terapéutico
El CBD, al contrario que el THC, es un cannabinoide sin efectos psicoactivos, es decir, no coloca. Este aceite de la planta de la marihuana posee numerosos efectos positivos para la salud, como informa este artículo de OneMagazine.es, donde se habla de su uso para tratar personas con problemas tan dispares como el dolor crónico, el dolor en las articulaciones, la ansiedad, la depresión o el insomnio.
Este compuesto natural se puede utilizar como tratamiento de todo tipo de dolencias debido a sus cualidades, sin efectos secundarios, relajantes y analgésicas. En cualquier caso, siempre hay que contar con un experto que esté cualificado en este tema, pues existen diferentes variedades de CBD, algunas más aconsejables, más eficientes que otras, para tratar según qué tipo de dolencia.
El CBD parece no tener fin en cuanto a sus posibilidades terapéuticas, sus excelentes propiedades narcóticas y relajantes están siendo estudiadas y usadas con gran éxito. Sus estudios más recientes se centran en la eficacia para el tratamiento de dolencias como las ya mencionadas y otras de tipo muscular, óseo o crónico, así como para combatir los trastornos depresivos o psicóticos.
Pero eso no es todo, ya se ha demostrado sobradamente su eficacia para reducir la inflamación o combatir las convulsiones que enfermedades como el párkinson producen. Así mismo, disminuye notablemente los efectos de la epilepsia o los espasmos que suceden involuntariamente. También, está resultando de gran utilidad para suavizar los efectos que los tratamientos con quimioterapia tienen en los enfermos de cáncer, contra la llamada anorexia nerviosa (pues abre el apetito), y cuenta con un enorme potencial como anticancerígeno.
Por si esto fuera poco, también tiene efectos muy saludables sobre muchas enfermedades cutáneas, como son el acné, la psoriasis, los herpes o los eczemas, entre otras.
El aspecto legal del CBD
Este tema entraña ciertos conceptos que hay que clarificar para saber qué aspectos concretos de los productos CBD están dentro de la legalidad y cuáles no. En la mayoría de los casos, se suelen meter dentro del mismo grupo elementos como el cannabis, el cáñamo, el THC o la marihuana. Así mismo, existe una gran disparidad en el aspecto legal según el lugar.
En términos generales, se está viviendo una autentica revolución en cuanto a la forma de percibir esta planta y los productos que se sustraen de ella. El cambio es notable en la sociedad y ya no se ve como una droga peligrosa, sino como una planta con muchas posibilidades.
En este sentido y como se menciona en este artículo, el aceite de cannabis está causando un auténtico furor en Estados Unidos, el país que iniciase la prohibición del cultivo de la planta y consumo de sus productos se abre ahora a la posibilidad de su legalización. En este territorio dependerá del Estado la existencia de unas leyes más o menos restrictivas para su consumo y comercialización. En los países del Oriente Medio, sin embargo, por poseer pequeñas cantidades se pueden recibir penas muy duras.
La legalidad del CBD en Europa
En Europa la legalidad de estos productos varía según el país. En líneas generales, existe una clara apertura para su uso médico, dietético e incluso estético. Estas leyes, como suele ocurrir en el resto del mundo, se determinan según la cantidad de posesión, la distribución que se realice, la forma de consumo o las condiciones médicas en las que se puede utilizar.
En Europa la legislación obliga a que los productos de CBD no contengan más del 0,2 % de THC, que es el componente psicoactivo de la planta de la marihuana y por lo que existen tantas dudas sobre su uso. Esto quiere decir que los productos que se comercialicen de CBD tienen que partir de variedades de cannabis ricas en CBD, como las de Cannabis Sativa L., que es el tipo oficialmente permitido en la Unión Europa.
En España, al contrario de lo que ocurre en países como Italia, Alemania, República Checa o Países Bajos, donde se pueden adquirir estos productos sin mayores problemas, no está permitida su venta para consumo humano. Solo es posible su comercio para uso cosmético, siempre de forma externa.