El coste de un funeral alcanza los 3.500 euros de media sin contar con un seguro de decesos

Más de la mitad de los hogares de Salamanca tiene un seguro de decesos, el 52,3% según el informe 'Estamos seguros', de Unespa. Una decisión acertada si tenemos en cuenta la factura a la que puede ascender la organización de un funeral. En estas fechas, coincidiendo con el Día de Todos los Santos, en las que se multiplican las visitas al cementerio para recordar los familiares y allegados fallecidos, la pregunta no es banal: ¿cuánto cuesta un entierro? De media, 3.500 euros en nuestro país si no contamos con seguro de decesos para hacer frente a los gastos del sepelio, cifra que puede ser aún mayor si es necesario realizar un traslado nacional (el coste ronda los 400 euros) o internacional (ronda los 6.000 euros).

¿Cuáles son los gastos más comunes de un funeral?

Además del evidente golpe emocional para los que pierden a un ser querido, morir puede salir literalmente muy caro. Tanatorio, féretro, urna en caso de incineración, lápida, flores, recordatorios, traslado hasta el lugar de enterramiento? son solo algunos de los gastos más frecuentes, a los que por supuesto se pueden añadir extras, como por ejemplo, música en el velatorio, mesa de firmas, esquelas en periódicos? Todo depende de la última voluntad del difunto y, por supuesto, de los recursos económicos de la familia y herederos.

Pero atendiendo a los gastos básicos, y según los datos de la asegurada Previsora Bilbaína, esto esta será la factura a pagar si no contamos con un seguro funerario.

• Ataúd o féretro: La media ronda los 800-1.000 euros, pero lógicamente todo depende del diseño y de los materiales utilizados en su fabricación y que pueden multiplicar el precio final.
• Tanatorio: La sala preparada para despedir a la persona fa

  llecida y dar el pésame a los familiares y allegadas tiene un coste medio inicial de 500 euros.

• Nicho y lápida: El precio medio de las lápidas ronda los 500 euros. El nicho, dependiendo de las provincias, se puede alquilar por un determinado periodo de tiempo. En este caso, hay que pagar una tasa anual (entre 150 y 500 euros, aproximadamente).
• Incineración: Desde 250 a 700 euros, siendo además una de las opciones que eligen el 35% de las familias. Las cenizas se pueden depositar en una gran variedad de urnas (cuyo coste varía en función de diseños y materiales). Se puede prescindir del nicho o lápida; en caso contrario, hay que afrontar el gasto del columbario (nicho para guardar las urnas con cenizas en los cementerios), y que puede rondar los 300 euros de media.
• Traslado: El traslado desde el tanatorio al cementerio es el servicio básico, con un precio que ronda los 500 euros. En caso de repatriación (traer de vuelta al país de origen del fallecido sus restos mortales) alcanza los 6.000 euros de media.
• Flores: Es uno de los detalles que no pueden faltar en un entierro, y el coste dependerá tanto de la cantidad (ramos, coronas?) como de la variedad floral. Desde los 50 a los 1.000 euros.
• Recordatorios y mesas de firmas: Pueden ser un gasto extra y que también dependerá del diseño. La media, 1 euro por cada recordatorio. En el caso de las mesas de firmas, unos 100 euros de media.
• Tasas y certificados: Tras la muerte de un familiar o allegado hay toda una serie de papeleo a resolver, desde el certificado de últimas voluntades, inscripción en el registro civil de la defunción, certificado médico de defunción? El pago de tasas ronda los 150 euros de media.