Viernes, 26 de abril de 2024
Volver Salamanca RTV al Día
La lluvia pilla en mitad de su viacrucis callejero a los niños de El Salvador
X
CIUDAD RODRIGO , SEMANA SANTA 2019

La lluvia pilla en mitad de su viacrucis callejero a los niños de El Salvador

Actualizado 05/04/2019
David Rodríguez

Durante el viacrucis se procesionaron dos pasos: la Virgen de los Niños y Jesús Nazareno

Por quinto año consecutivo, la Parroquia de El Salvador de Ciudad Rodrigo ha dado la bienvenida a la Semana Santa con un viacrucis callejero protagonizado por niños, que unió durante la tarde del viernes la sede de la Avenida Conde de Foxá del Colegio Misioneras de la Providencia-Santa Teresa de Jesús con la Iglesia de El Salvador, ubicada en el barrio de Las Canteras.

Este año, ese viacrucis estuvo totalmente marcado por las inclemencias meteorológicas, que obligaron a desarrollar más de la mitad del mismo ya en la Iglesia de El Salvador tras sorprenderles la lluvia a mitad de trayecto (pese a todo hubo una buena asistencia, superándose de largo el centenar de participantes).

El caso es que el cielo estuvo en Ciudad Rodrigo muy inestable desde primera hora de la mañana, alternándose continuamente las nubes, la lluvia y el sol. Justamente en el momento fijado para el inicio del viacrucis, las 17.30 horas, estaba lloviendo con cierta intensidad, por lo que tras esperar unos minutos se comenzó a rezar la primera estación en el porche del patio del Colegio Misioneras, donde dieron la bienvenida el párroco, José María Rodríguez-Veleiro, y el Administrador Apostólico, Jesús García Burillo.

Al concluir la primera estación, había dejado de llover y el cielo parecía que clareaba un poco, por lo que se decidió salir, mientras sonaban piezas de Semana Santa por el altavoz que se llevaba. Sin embargo, era un falso espejismo. La comitiva llegó a rezar cuatro estaciones en la calle, pero a la altura del cruce de la calle Caridad con la calle Iberia empezó a llover, y con bastante fuerza, teniendo que ir a toda prisa hasta la Iglesia de El Salvador.

Además, esa 'carrera' hacia la Iglesia hubo que hacerla tapando las dos grandes novedades del Viacrucis de este año: los dos pasos semanasanteros de creación propia, una Virgen de los Niños que portaba el Rosario Misionero y que contó incluso con un estandarte propio, y un Jesús Nazareno (el año pasado se contó con una Dolorosa más artesanal). Ambos pasos fueron llevados por niños, al igual que el elemento fijo en el viacrucis de El Salvador que fue por delante suyo: una cruz.

Una vez se llegó a la Parroquia de El Salvador, se rezaron las estaciones del viacrucis que faltaban (de la sexta hasta el final), intercalándose con algunas canciones cantadas por el coro (que también había ido cantando por la calle), y algún Padrenuestro. Cada estación corrió a cargo de un niño, que dio lectura a la estación en sí y a una reflexión de comparación con el mundo actual. Como conclusión del acto, hubo unas palabras de despedida del Administrador Apostólico, Jesús García Burillo, quién también impartió la bendición final.

Comentarios...