Bastante antes de la llegada del pelotón se congregaron simpatizantes de ambos bandos y la Guardia Civil tuvo que intervenir para aliviar tensiones
La localidad de Retortillo acogía esta tarde la llegada del pelotón de la Vuelta Ciclista a Salamanca Elite y Sub-23, y lo hacía después de una maratoniana jornada de 148 kilómetros por Las Arribes.
Todo transcurria con normalidad, los simpatizantes de la mina de uranio, habían tenido una fiesta, y se lo estaban pasando a lo grande en un día familiar con sus reivindicativas camisetas amarillas de "Si a la mina".
A eso de las siete de la tarde empezaron a llegar los "anti nucleares" o la plataforma en contra de Berkeley, fue entonces cuando unos a cada lado de la plaza expresaron a gritos sus pareceres y versiones totalmente diferentes en contra y a favor de la mina, viviendose momentos de tensión minutos ante de la llegada de la segunda etapa de la Vuelta Ciclista a Salamanca,
De las palabras estuvo a punto de pasarse a las manos, pero la rápida intervención de la Guardia Civil conseguía aplacar los ánimos de unos y otros, que se enfrentaron verbalmente subiendo de tono a medida que pasaban los minutos. Y es que la tensión iba creciendo por momentos pues los anti mina trataban de tapar la publicidad de Berkeley Minera España ante la resistencia de los partidarios de la mina. Sin embargo, al final la Benemérita tenía que intervenir porque ambos bandos se volvían a acalorar.
La entrega de premios también estuvo marcada por los gritos de protesta de los manifestantes, teniendo que acudir de refuerzo los Guardias Civiles que acompañaban a los cilistas durante la etapa.
Afortunadamente todo quedó en algún forcejeo entre manifestantes y Guardias Civiles sin que llegara a más que varios momentos de tensión
Reportaje gráfico: Adrián Martín