España debuta en el Mundial con empate ante Portugal y aparca el debate sobre el cese de Lopetegui ...

En un partido de ida y vuelta, donde el último tanto del 'hat-trick' de Cristiano Ronaldo al borde del final caía como un jarro de agua fría, España debutaba en el Mundial de Rusia 2018 con empate 3-3 ante Portugal, vigente campeón de Europa. Un partido que comenzaba marcado por el debut de Fernando Hierro en sustitución de Lopetegui, que era cesado hace apenas dos días tras conocerse su fichaje por el Real Madrid, pero donde el debate del banquillo se disipaba nada más empezar a rodar el balón.

Y es que, además, la figura del malagueño es, sin duda, un peso importante en la afición. Durante años defendió los colores de numerosos equipos, entre ellos el Real Madrid, y de la selección española, donde ocupaba el cargo de director técnico. Sin duda, alguien muy reputado que pronto se ganó el respaldo de la afición. Acompañado en el banquillo por Albert Celades, no paró de dar instrucciones y ánimos a sus futbolistas.

Y eso que fue un partido intenso, de idas y vueltas, donde Portugal, o mejor dicho, Cristiano Ronaldo, prácticamente transformó todas las ocasiones de que dispuso. No habían transcurrido cuatro minutos cuando el delantero portugués marcaba de penalti el primero, un penalti más que dudoso. A partir de ahí, España, lejos de caer, tomó las riendas. Por instantes recordó a la mejor España, a la que en 2010 hizo feliz a todo un país levantando la Jules Rimet. El Silva e Iniesta se asociaban y España mandaba y templaba. Sólo faltaba el gol y ese llegaba de la mano de Diego Costa, un futbolista que también había sembrado dudas con su selección, pero que cuajaba el que probablemente ha sido su mejor partido con España. Sin embargo, al borde del descanso, De Gea se convertía en el triste protagonismo y se tragaba un gol tras un disparo de Ronaldo. De nuevo tocaba remar y tras el paso por los vestuarios, de nuevo el delantero de origen brasileño ponía el empate. España estaba lanzada y tres minutos después, en el 58, Nacho Fernández ponía el 3-2 para España. Todo estaba para la sentencia, pero ésta no llegaba y al borde del final, una falta que Piqué no debió cometer nunca, permitía a Cristiano Ronaldo poner el empate.