Infinidad de chapas y restos de vasos y botellas, recuerdos del Carnaval donde estuvo la carpa

Con la retirada en los últimos días de las últimas casetas del Paseo Fernando Arrabal, y de las últimas agujas, las calles mirobrigenses han dicho adiós de forma definitiva a todos los elementos instalados para la celebración del Carnaval del Toro.

Sin embargo, cuando ha pasado un mes exacto de la finalización del evento, todavía hay restos del Carnaval en las calles en forma de porquería, especialmente en los antiguos Jardines Bolonia, que albergaron un año más una gran carpa que estuvo operativa desde el domingo antes del Carnaval y hasta una vez pasado el Domingo de Piñata.

Como se puede ver en las imágenes que acompañan estas líneas, todo el entorno del hueco donde estuvo instalada la carpa está lleno de chapas de botellines, restos de vasos de plástico, y lo que es más preocupante (de cara por ejemplo a los niños que se pueden acercar a jugar por allí), restos de cristal de botellas de licor y botellines de cerveza. Asimismo se pueden ver otros restos como cajetillas de tabaco o tenedores de plástico.

Esta suciedad supera el Paseo Fernando Arrabal en sí, llegando a los pies del lienzo de la muralla. Aunque menos, también quedan algunos restos de basura en la zona donde estuvieron las casetas de peñas.