“Como voluntario siempre se recibe más de lo que das”

El voluntariado es una de las fortalezas de la AECC (Asociación Española Contra el Cáncer), voluntarios comprometidos con la labor de acompañamiento, apoyo social y emocional a los pacientes oncológicos, familiares y cuidadores; con la divulgación de mensajes de salud y con el impulso a la investigación para seguir avanzando en la lucha contra el cáncer. Un gran equipo de voluntarios dinámico y en continua formación, preparado para estar al lado de pacientes y familiares desde el primer momento del diagnóstico y durante todo el proceso de la enfermedad. La AECC cuenta con más de 20.000 voluntarios en toda España, más de 200 en Salamanca.

Los voluntarios de la AECC Salamanca realizan su labor en el voluntariado hospitalario, voluntariado domiciliario, voluntariado en la sede la asociación o en el voluntariado de prevención. 44 personas forman actualmente parte del voluntariado hospitalario, en el Hospital Clínico Universitario de Salamanca. "Lo más importante es la labor tan delicada y humana que hacen los voluntarios con los pacientes y la familia", subraya Carmen Real, trabajadora social y coordinadora del voluntariado hospitalario de la AECC Salamanca.

Voluntariado hospitalario

La decisión de ayudar como voluntario es el primer paso de un proceso de entrevistas y cursos de formación antes de decidir cuál es el área de voluntariado más idóneo al perfil, preferencias y disponibilidad de tiempo de cada voluntario. El voluntariado hospitalario recibe además un curso de formación específica, y aproximadamente cada 3-4 meses, cursos de formación continua.

Pilar es voluntaria desde hace 12 años, y desde el primer momento se decantó por el voluntariado hospitalario. La enfermedad afectó a "seres queridos muy cercanos", y eso la llevó a conocer más de cerca y a compromoterse con la labor de la AECC. Voluntariado que, como apunta, "te da lecciones de vida", "es muy gratificante porque siempre se recibe más de lo que das". Ese "granito de arena" que aporta cada voluntario hace posible "ayudar a muchas personas en un momento complicado".

El voluntariado tiende la mano al paciente oncológico y a sus familiares, siendo tan importante el apoyo y acompañamiento como "la labor de información de todos los recursos y servicios de la AECC para hacer más llevadero este proceso", apunta la coordinadora del voluntariado. Recursos para dar respuesta a todas las necesidades de los pacientes, incluyendo por ejemplo dentro del servicio de atención social los préstamos de material ortoprotésico o indicaciones oncoestéticas.

Voluntariado de la AECC que se evalúa con muy buenos resultados por parte de los pacientes y sus familias, tal y como se desprende periódicamente en las evaluaciones de la actividad de voluntariado, destando de su labor el acompañamiento, el apoyo emocional y la información sobre servicios de ayuda psicosocial. Según datos del Informe de Satisfacción de los Beneficiarios del Programa de Voluntariado 2016 de la AECC. El 96% de los pacientes se encuentran en los niveles superiores de satisfacción, y la atención ofrecida por los voluntarios en los hospitales obtiene una puntuación media de 4,61 sobre 5.

Atención y apoyo a los familiares

El cuidado continuo de un enfermo supone un gran esfuerzo y en ocasiones, un desgaste emocional importante. Por este motivo la AECC pone especial atención al apoyo de los cuidadores de los enfermos con cáncer. Los voluntarios ofrecen relevar en el acompañamiento del familiar enfermo en el hospital, ayudar en la realización de gestiones, escuchar cuando el familiar o cuidador necesita hablar e informar de los servicios de la AECC dirigidos a familiares, como el servicio de respiro familiar, servicio de atención psicológica o talleres de relajación (atención grupal).