¡Que barato es delinquir!...para algunos

Después de algunas semanas sin teclear articulo alguno, hastiado del run run permanente que nos ha sumido la situación de España provocada por algunos incoherentes catalanes. Hoy día de unas elecciones que desde mi miopía social no entiendo muy bien vuelvo a retomar fuerzas, creo que la última vez, para hablar del manido tema.

Si alguien entiende, como se puede figurar de forma permanente en todo el boato de unas elecciones democráticas siendo reo o huido, que me lo explique por favor.

Como es posible que por "una gallina" te metan en lo más hondo del "trullo" y por poner a un país contra las cuerdas te sigan pagando una nómina, imagino que unas dietas (aunque la alimenticia bien le vendría) se fleten aviones de cortesía, etc y todo el coste a nuestros bolsillos agujereados de tantos chinarros.

Y ya que estamos, me gustaría preguntar : ¿cómo algunos medios de comunicación se hacen eco con altavoz a máximo nivel de noticias que confunden a la masa social, tales como las declaraciones de Xavi Hernandez, Pep Guardiola o cínicos del mismo pelo?

Es tan evidente la publicidad encubierta que se da a países tan "democráticos", en los que la mujer tiene menos voz que el mudo de cenicienta, y los trabajadores de ese mundial a todo calor, son la viva imagen de Kunta Kinte en los campos de algodón.

¿Y qué me dicen de la parafernalia de Ada Colau en nuestra emblemática televisión? ¿Está preparando el terreno de las tertulias okupas, de las luchas de bate de beisbol o serán charlas de cómo menoscabar a los que sostienen un país?

Y hoy día 21 de Diciembre de 2017, esperemos que no se nos encoja el corazón, la intención de voto es una, la realidad de voto otra. En el día a día el okupa, no trabaja, el fan de los profetas del deporte mataría por contentar a sus ídolos, el separatista convencido sólo tiene un objetivo, pero los que trabajan, los que sólo piensan en llevar una barra de turrón a la mesa estos días podrán introducir el papelito o no, los tiempos no son los mismo para el que suda que para el que hace sudar.

De todas estas preguntas que permanentemente atosigan mi maltratado cerebro, sólo he encontrado una respuesta : hay que cambiar la Constitución, el Poder Judicial, o los estatutos de la comunidad de vecinos, que más da, todo aquello en los que se refugian los impresentables de cada momento para salir indemnes de fechorías y barbaries. ¡Pero ya! .