Programa Mixto de Jardinería

¿Nuevo atentado contra el jardín histórico El Bosque?

UN JARDÍN HISTÓRICO DEBE SER RESTAURADO POR EXPERTOS

El Grupo Cultural San Gil solicitó hace más de un mes la documentación sobre el proyecto anunciado para El Bosque, denominado "Programa mixto de jardinería", por supuesto sin respuesta alguna por parte de las administraciones titulares. Según los detalles ofrecidos por el Ayuntamiento, y tal como nos temíamos, el proyecto no parece reunir los mínimos requisitos para intervenir con garantías en un BIC-Jardín Histórico, pues ninguno de los formadores previstos estaría preparado para ello, dado el perfil que se requiere. Las intervenciones en un Jardín Histórico, de acuerdo con los expertos en la materia, deben ser dirigidas por un arquitecto paisajista, contar con un equipo multidisciplinar en el que estén representadas materias concurrentes como arquitectura, jardinería o historia (no exclusivamente por un ingeniero agrónomo) y seguir un proyecto de restauración adecuado. Todavía desconocemos el diseño y proyecto de lo que allí se pretende realizar, bajo qué criterios y en base a qué documentación, por lo que podría resultar un fiasco de proporciones monumentales, como algunas de las intervenciones fallidas realizadas en El Bosque desde 2003 en las que ?conviene recordarlo? se ha gastado gran cantidad de dinero público para nada o incluso para empeorar el delicado estado del BIC.

La intervención de este 'Programa mixto de jardinería' se centraría en la huerta baja y espacios anejos, el jardín romántico, el jardín delantero junto al palacete y el invernadero, espacios en los que no se puede actuar sin considerar algunas cuestiones previas:

1. ¿Se ha previsto una intervención arqueológica en la huerta (o en los demás espacios) con el fin de determinar los vestigios sólidos del trazado original, tales como canalizaciones, atarjeas, cimentación de posibles fuentes, etc., y de estructuras ligeras propias de la jardinería, tales como zanjas de drenaje, surcos de plantación, bandas de terreno compactado en calles, etc.?; en caso de que así sea, ¿se van a utilizar métodos apropiados a las características del BIC, es decir, procedimientos indirectos y no destructivos, capaces de detectar tales estructuras ligeras con técnicas como fotogrametría infrarroja, resistividad magnética, magnetometría, radar, etc., según experiencias de excelente resultado como la del Privy Garden de Hampton Court (1993), más discreto en casos españoles como la Casa de Campo de Madrid o el jardín del palacio de los Castejones en Ágreda?; ¿el arqueólogo que se va a contratar se ocupará de esta intervención previa o sólo del seguimiento a pie de obra cuando se roture el terreno?

2. ¿Se va a respetar el trazado actual del jardín romántico o se va a rediseñar?; en el segundo caso, ¿bajo qué criterios y documentos?

3. ¿Sobre qué criterios y documentos se va a diseñar el jardín delantero situado junto al palacete?

4. El invernadero es un añadido del último tercio del siglo XIX que desde el punto de vista estético no aporta nada al conjunto de terrazas, antes al contrario, perjudica la lectura del trazado renacentista al interrumpir groseramente la rampa lateral de comunicación entre la huerta baja y la Huerta de los Bojes, lo mismo que la caseta de herramientas, motivo por el cual deberían ser eliminados ambos escollos (con mayor motivo por las placas de uralita que todavía tienen). Las evidentes necesidades pragmáticas de aclimatación de plantas, semillero a cubierto, etc. pueden ser satisfechas en otra parte, desmontando el invernadero actual, restaurando sus piezas y montándolo de nuevo en una zona de la villa que disponga de la misma orientación solar, cercana al núcleo aterrazado, como el ángulo oeste del Prado Chiquero o el Prado Bajo de Solana. Recordemos que en 2010 se decidió suprimir un elemento de hierro con mayor interés histórico y artístico (el cenador con enverjados y bancos situado en el centro de la Huerta de los Bojes), y se hizo precisamente para recuperar el trazado y el aspecto original de esa terraza: no hay motivo para cambiar ahora de criterio tratando de salvar unos pocos hierros carentes de valor que estorban el primitivo y más valioso trazado renacentista. Por otra parte, la rehabilitación de la rampa original facilitaría el acceso de personas con dificultades motoras y el uso eventual de maquinaria de jardín.

Ante esta problemática situación, el Grupo Cultural San Gil ya se ha puesto en contacto con diversas instituciones y personas relacionadas con la protección y conservación del Patrimonio y los jardines históricos con el fin de que se interesen por el proyecto y valoren el cumplimiento de la legislación vigente, así como por las buenas prácticas que deben regir en la restauración de un BIC-Jardín Histórico como el de Béjar. No se puede intervenir en un BIC valioso como El Bosque entrando como un elefante en una cacharrería. Nuestra asociación responsabilizará al Ayuntamiento de Béjar y a la Junta de Castilla y León de las probables tropelías que puedan cometerse durante la ejecución de este proyecto y exige de ambas administraciones la contratación de personal cualificado en las disciplinas antes señaladas (insistimos en la figura del arquitecto paisajista), con el asesoramiento de expertos en el BIC-Jardín Histórico que se pretende restaurar (algo que, de acuerdo con el Plan Director de El Bosque, debería hacerse desde el Consejo Asesor, pendiente de constituir y convocar). Sería muy lamentable que las malas intervenciones de hoy tengan que ser corregidas dentro de algunos años, con mayor gasto para el contribuyente y una imperdonable pérdida de tiempo, sumada a los ocho años de retraso que ya acumulan las administraciones local y regional en el cumplimiento de lo dispuesto en el Plan Director.

La recuperación de El Bosque no puede quedar supeditada a políticas populistas (o, más bien, populacheras) como las del Ayuntamiento de Béjar, en las que todo vale con tal de tener contentas a unas pocas personas en paro, durante seis meses, aun a costa de destrozar la única villa de recreo renacentista que se conserva íntegra en España.

GRUPO CULTURAL SAN GIL