La apuesta de Carioca para que los cuentos crezcan Fuertes

El otro día vi a Carioca colgada del paraguas en el que ha dibujado el mundo. Bueno, ella y Gloria Fuertes, que escribió ese cuento en el tiempo de descuento.

La otra tarde vi a Carioca hablar con ardillas, jirafas, tortugas y elefantes. En la conversación se coló de rondón Gloria Fuertes para poner verso y guión.

Ayer por la mañana vi a Carioca tejer poemas con el hilo de una tela de araña. Las agujas se las prestó Gloria Fuertes para que bordase sus versos, los "Versos de Gloria", versos que saben a besos, a caramelos y a zumo de zanahoria.

Cuando Carioca cuenta "Versos de Gloria", la palabra "versos" deberíamos ponerse con "B". Con B de boniato, con B de bonito, con B de bandera? Porque Carioca iza la enseña de la palabra, que ondea mecida por sonrisas infantiles y vientos de imaginación.

El próximo domingo (11 de junio), a las 12,30, en Manolita Café Bar (calle Palominos, 21), Carioca se subirá al escenario para hacernos revivir las historias de aquella madrileña de voz rasgada que entendió a los niños como pocos adultos pueden conocer, que trató a los adultos como si supieran alcanzar todo lo que llegan a comprender los niños.

Ante nuestra mirada desfilarán muñecos y marionetas vestidas de creatividad. Libros imposibles con sabor a viejo, guiños, sonidos y versos.

El espectáculo se anuncia para mayores de tres años. Yo apostillaría que está dirigido a todos los públicos. Para niños, por supuesto. Pero también para adultos, para esos mayores a los que aún no se les han caído los dientes de leche de la imaginación.

Yo acudiré a la cita, que no pude estar cuando lo estrenó en la Feria del Libro de salamanca; que tampoco lo vi en Madrid, en la Feria de Fuenlabrada. El domingo, digo, no me lo pierdo, porque Manolita se escribirá con "C", Con C de cuentos. Con C de Carioca.

Fotos: Paraguas (Sara Marcos), Cometa (Fernando Saldaña)