Berkeley califica de “artimaña demagógica” la información de Stop Uranio sobre sus...

La Plataforma Stop Uranio y la empresa Berkeley volvieron a cruzarse acusaciones durante la jornada del martes mediante sendas notas de prensa. Como suele ser habitual, la disputa la inició Stop Uranio con una serie de afirmaciones que Berkeley se encargó de explicar horas después calificando la acción de la Plataforma como de "artimaña demagógica".

En su nota, Stop Uranio 'denunciaba' que Berkeley había procedido a "obsequiar a los vecinos de Retortillo con botellas de vino y dulces para felicitarles las fiestas navideñas", indicando que no saben si es "en agradecimiento" por el hecho de que la Corporación haya declarado a Stop Uranio 'non grato' o "simplemente pretenden seguir comprando su voluntad".

Para Berkeley, Stop Uranio únicamente busca "confundir y deteriorar la excelente relación que la empresa tiene con las comunidades locales", recordando que desde el 2006 tiene una "magnífica relación con los municipios y vecinos" de las zonas donde actúan. Según expresan, es "un pilar básico" en su forma de actuación "el mostrar su agradecimiento" a todas aquellas personas con las que día a día trabajan "codo con codo".

Por ello, y "como hacen la mayoría de las empresas y particulares", durante esta época navideña se agradece "el esfuerzo y dedicación" de las personas con las que se relacionan a diario con un "pequeño detalle" que llega a trabajadores, propietarios, consultores y contratistas, y que no sólo se hace en Retortillo, "sino que se extiende a numerosos pueblos de la comarca así como otras muchas localidades de la geografía española".

Berkeley expresa que "por mucho que pese a Stop Uranio", no cambiarán "ni lo más mínimo" su forma de trabajar "ni la forma de desear felices fiestas a sus colaboradores ni privará a sus stakeholders del reconocimiento que se merecen".

En esa misma nota de prensa, Berkeley anuncia que ha dado otro "nuevo e importante paso" que permitirá iniciar la construcción de la mina a principios de 2017. Ese paso es la adquisición de la maquinaria principal para el circuito de trituración, consistente en unas trituradoras primaria y secundaria, "que configuran el corazón de esta instalación". Según explica Berkeley, el pedido ha sido hecho a la empresa Sandvik, "uno de los tres principales proveedores de este tipo de equipos a nivel internacional".

La compañía resalta que su proyecto minero "revitalizará a una comunidad que sufre de falta de inversión durante muchos años y que está gravemente afectada por el desempleo". En este sentido, indican que ya hay 50 personas que trabajan para ellos, y que en 2017 esperan alcanzar la cifra de 450 personas.