Rivera exige cinco cambios constitucionales en tres meses para dar el sí a Sánchez

Albert Rivera ha lanzado hoy un órdago a Pedro Sánchez. El acuerdo de gobierno entre PSOE y Ciudadanos está ya muy avanzado, en su fase final, pero no habrá pacto alguno salvo que el candidato socialista acepte realizar en sus primeros tres meses de mandato, si es que logra superar la investidura, una reforma "esprés" de la Constitución en cinco puntos muy concretos.

O acepta o se rompen las negociaciones. Todo o nada. El líder de Ciudadanos convocó una rueda de prensa exclusivamente para dar una vuelta de tuerca pública a los socialistas y pedirles "un último esfuerzo". Considera que si Sánchez no acepta llevar a cabo la reforma de cinco puntos que demanda el Ejecutivo que saliese de las negociaciones no podría llamarse "reformista y de cambio", por lo que de ningún modo lo apoyaría. En cambio, si da su visto bueno, Ciudadanos estaría dispuesto a cerrar el acuerdo global y a pasar de la abstención al sí en el debate de investidura.

Los cambios en la Carta Magna que Rivera considera innegociables son la desaparición de las diputaciones provinciales -con la excepción de las forales vascas-, lo que permitiría ahorrar, dice, unos 4.000 millones al año y evitar otra subida de impuestos; acabar con el aforamiento de los diputados y senadores -su derecho a que cualquier denuncia contra ellos deba verse en el Tribunal Supremo- y a limitar su inviolabilidad -el permiso previo de las Cortes para que puedan ser procesados- a su función parlamentaria, a los delitos de libertad de expresión y opinión; reducir los mandatos de los presidentes del Gobierno a un máximo de ocho años; cambiar el sistema de elección de los miembros del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para despolitizarlo y que se base en el mérito y capacidad; y facilitar que los ciudadanos puedan participar en la promoción de leyes con la reducción de las firmas necesarias para presentar en el Congreso una Iniciativa Legislativa Popular de las actuales 500.000 a la mitad.

Los cinco puntos que propone Ciudadanos podrían ser aprobados por el mecanismo de reforma constitucional menos gravoso, el que permite su aprobación con el simple respaldo de los tres quintos del Congreso y del Senado. Sin disolución posterior de las cámaras y sin referéndum obligado. El mismo que permitió las únicas dos reformas realizadas durante la democracia, la que dio voto a los extranjeros comunitarios residentes en España y la que impuso límites al gasto público y lo subordinó al pago del déficit y la deuda con la modificación, en 2011, del artículo 135.

De hecho, según ha indicado Rivera, el resto de cambios constitucionales que también prevé el acuerdo, y que requieren del uso del mecanismo de referéndum, quedarían para después y su contenido se definiría en una ponencia parlamentaria al efecto.

Fuente El Norte de Castilla