Adjudicación a un "gran moroso"

Figurar en el listado de "grandes morosos" de la Agencia Tributaria no es óbice ni cortapisa para resultar adjudicatario de un contrato de la Junta de Castilla y León. Al menos no lo ha sido para Secuoya Grupo de Comunicación Secuoya, ganador del concurso convocado por la Consejeríade la Presidencia para cubrir el "servicio de asistencia técnica y producción audiovisual de la actividad institucional de la Junta de Castilla y León o de interés para la Comunidad".

Según la resolución de dicho concurso, la compañía Central Broadcaster Media, filial de Secuoya, se hará cargo de dicho servicio durante este año y el próximo percibiendo por ello un total de 772.105 euros. La cuantía del contrato queda lejos de la deuda acumulada con Hacienda, que se aproxima a los 2,3 millones, pero algo ayudará a ir enjugándola.

La Ley de Contratos del Sector Público excluye de cualquier adjudicación a las empresas que no se encuentren al corriente de sus obligaciones tributarias, pero dicho requisito lo solventó Secuoya, solicitando y obteniendo de Hacienda un aplazamiento de pago. Gracias a ese aplazamiento el grupo audiovisual no solo ha podido optar a este contrato con la Junta, sino que el pasado mes de octubre fue uno de los agraciados en el concurso convocado por el gobierno central para adjudicar seis nuevos canales de televisión digital terrestre.

Secuoya, que se dispone a poner en antena el canal D-10, centraba hasta ahora su actividad en la producción de programas para televisiones tanto públicas como privadas, teniendo adjudicados además los Servicios Informativos de la televisión autonómica de Murcia. Entre las compañías controladas por el grupo figura New Atlantis, productora de la que es accionista el periodista burgalés Ernesto Sáez de Buruaga. Sonado fue en su momento el fracaso de su programa de debate "Así de claro", producido por Secuoya para TVE, que a la tercera semana lo retiró de la parrilla ante los ínfimos índices de audiencia.

Hasta la resolución de este último concurso, los servicios audiovisuales institucionales de la Junta de Castilla y León han estado adjudicados en los últimos años a la compañía salmantina Broadcast Producciones S.L., que será sustituida a primeros de marzo por la filial de Secuoya.