"Es imposible olvidar, Atocha es inolvidable, una herida y una cicatriz que sigue ahí"

"Si el eco de su voz se debilita, pereceremos". Bajo la placa que contiene la frase de Paul Eluard, 39 años después, el recuerdo de los abogados de Atocha, asesinados y supervivientes de aquel trágico 24 de enero de 1977 en el despacho laboralista de Atocha 55 de Madrid, se mantiene intacto. "Es imposible olvidar", subraya Alejandro Ruiz-Huerta Carbonell, unico sobreviviente, tras la muerte el pasado año de Lola González, que este sábado ha estado en Salamanca en el homenaje a los abogados de Atocha y, en especial por ser su ciudad, a Serafín Holgado, aquel tranquilo estudiante de Derecho llegado de Salamanca. La calle dedicada a los abogados de Atocha ha sido el escenario en el que se ha celebrado el acto organizado por CCOO, colocando una corona de flores en la placa en su recuerdo.

"Siempre digo que los sobrevivientes, y el problema es que ahora estoy solo, siempre estamos en la lucha entrre la memoria y el olvido". "La Fundación Abogados de Atocha", añadió, "está para extender la memoria de Atocha, pero a la vez para sobrevivir necesitamos olvidar de vez en cuando". "Atocha es inolvidable, es una herida y cicatriz que tengo y que seguirá ahí. Cuando hay un atentado en París, ayer en Canadá, siempre estará presente Atocha, la violencia que tenemos que echar de nuestra realidad desde la serenidad y desde el trabajo".

Alejandro Ruiz ha querido estar en Salamanca en recuerdo a Serafín y "por el compromiso colectivo con mi sindicato, CCOO, que para mí sigue siendo la columna vertebral de la democracia española". "Sin CCOO, el deterioro tan tremendo que está sufriendo en España el estado de derecho, nos hubiera llegado al caos. Hay que tener mucho empeño y constancia, serenidad para mantenerse en la línea de trabajo".

Los abogados de Atocha son un ejemplo no solo de la defensa de los derechos de los trabajadores, sino como añadió Emilio Pérez, secretario provincial de CCOO, "de los derechos de una transición y de una ciudadanía que fueron fundamentales para nosotros". Un día, añadió, "con una doble vertiende, desde CCOO los militantes hacemos examen de construcción con respecto a lo que significamos y la labor que tenemos que seguir desarrollando, y para reivindicar esa falta que tiene la sociedad tan individualizada de reivindicar lo colectivo. Juntos, todavía, se pueden hacer muchas cosas. CCOO es necesaria y útil, con gente como ellos, y día a día hay que seguir viviendo de su sabiduría".

Posteriormente, ha tenido lugar un emotivo homenaje en el cementerio de Salamanca donde, tras el manifiesto leído por el secretario provincial de CCOO, ha intervenido Alejandro Ruiz para hablar de Serafín y de las últimas horas que compartieron. El canto de la Internacional ha cerrado un acto en el que no han faltado los claveles y los ramos de flores la tumbra de Serafín. El PCE de Salamanca, presente en sendos actos, también se ha acercado hasta la calle dedicada a Serafín Holgado en el Barrio Blanco.

Como consecuencia de los disparos perpetrados por los asesinos de la ultraderecha resultaron muertos los abogados laboralistas Enrique Valdevira Ibáñez, Luis Javier Benavides Orgaz y Francisco Javier Sauquillo Pérez del Arco; el estudiante de derecho Serafín Holgado; y el administrativo Ángel Rodríguez Leal. Resultaron gravemente heridos Miguel Sarabia Gil, Alejandro Ruiz-Huerta Carbonell, Luis Ramos Pardo y Dolores González Ruiz.

Fotos: Alejandro López