Los tiestos de Colas

Siempre nos ha parecido que los tiestos son cosa que se le da mejor a las mujeres. En este caso vemos a través de una pintura, y que éste que os habla no ha pintado ni uno más ni uno menos de los que había sacado Colas como todos los días; y el día que saqué la fotografía, para posteriormente pintarlo, contamos todos, y tenía cerca de 150. "Vaya trabajito que tienes Colas", le decía yo; y él me respondía, "hijo, es con lo que me entretengo, así paso el tiempo, me gustan los tiestos". Y me estuvo diciendo las distintas flores de cada uno, pero un servidor que es un neófito en esa materia no se enteró de nada. La cosa es que ya estaba hecha la fotografía, y en mi estudio de San Sebastian la plasmé en el lienzo, o tablex no me acuerdo bien, y en uno de los viajes a mi pueblo se lo entregué, y el hombre no cabía en sí de gozo, y dando gracias y más gracias ya le estaban buscando en su casa el mejor sitio para ponerlo. Pepi, su mujer, le decía: "Oye Colas, porque no lo ponemos aquí". A lo que él le replicaba: "Pepi,yo creo que en esta pared se va a ver mejor". "Bueno majos le decía yo, os dejo y seguro que lo pondréis en el mejor sitio". Por cierto, si nos fijamos en la firma, Ramón, se ve que es de hace bastantes años, pues ya hace mucho tiempo que el señor, un francés que se encargaba de colocar mis obras en distintos lugares de Francia, en una cena oyó que me llamaban Monete, y él fue el causante de que desde entonces firme con ese seudónimo, que mas que seudónimo viene de mi nombre, ya que de Ramón, en Ledesma, me llamaban Ramonete, y de más mayor me quede definitivamente con Monete; eso sí, para el nombre artístico se le añadió una T al final, y así con esa firma hasta que este que está tecleando ya no pueda más, y que dure por muchos años mi pulso para seguir pintando, porque por falta de afición y ganas no se quedará la cosa.

También diremos que Colas era el frutero de Ledesma por antonomasia, aparte de otros que había, pero en mayor medida Colas y Pepi se llevaban la palma, como ya he contado en otro relato anteriormente, en el que resaltaba que esa calle que vemos en el cuadro, y que es la calle o calleja Traviesa, fue merecedora de un premio o reconocimiento en 1971 a la calle mas florida.

Texto y fotos: Monette González