Formación de profesores-educadores

Nosotros en la Casa Escuela Santiago Uno optamos como modelo pedagógico por Milani y Freire sin olvidar a Calasanz. Del último su dedicación a los pobres con su Piedad y Letras, sacrificando su comodidad y ambición e incluso su Orden Religiosa por que sus pobres tuvieran la mejor escuela, sus profesores aprendían matemáticas con el propio Galileo, perseguido por la Iglesia. Del segundo sus palabras generadoras de pensamiento libre y el mejor alumno el que más ayuda a los demás, su pedagogía del oprimido nos invita a transformar la sociedad desde la escuela. El primero, nuestro santo y seña, la pedagogía de Barbiana clasista a favor de los últimos, compensadora, crítica y desenmascaradora, con la mayeútica y la ironía de Sócrates, sus escritos colectivos y lo riguroso de su análisis del periódico y aprendizaje de idiomas, los alumnos maestros desde los quince años, su carta a una maestra importantísima de leer y también los escritos colectivos que se hicieron en Santiago Uno.

Tenemos una clara declaración de intenciones desde hace muchos años y una preparación y elección también, queriendo dedicar nuestra vida al lado de los últimos, ellos son las estrellas que nos guían.

En una educación transformadora para el cambio se necesita una influencia individual y colectiva que combata las múltiples interferencias de una sociedad injusta basada en la hipocresía del consumo y el bienestar de unos pocos que no se mezclan, en todos los sectores de la sociedad, desde la política hasta una gran parte de la Iglesia que al Papa Francisco lo escuchan según sus intereses.

Nosotros seguimos un modelo terapeútico constructivista sistémico y centrado en soluciones de terapia breve . Se busca mejorar a nivel conductual, cognitivo y afectivo. Redefinimos los traumas y los sueños imposibles con los chicos, externalizamos los problemas de la droga, la violencia o el fracaso escolar para que no lesionen su persona, deconstruimos los rencores y construimos una nueva realidad desde el lenguaje presuposicional y los mensajes yo de nuestra propia experiencia, cuantificando una escala de evolución para saber que pueden hacer ellos para subir un peldaño independientemente de lo que hagan los demás. Los chicos se reponsabilizan y tienen control sobre sus éxitos, los fracasos o lo negativo nos lo atribuimos los adultos que somos los profesionales, el paciente no encuentra el cómo curarse eso es labor del médico. Respecto a los sueños vamos viendo que parte ya se está cumpliendo para tenerlos como horizonte y que no dejen de soñar.

Pretendemos que los educadores nos eduquemos por ósmosis, pero para eso es necesario permeabilidad y humildad. Mientras tanto haremos role playing y estudiaremos mucho y sobre todo viviremos mucho para que aunque sea por supervivencia no nos acomodemos y podamos seguir teniendo el privilegio de disfrutar de estos increíbles alumnos y profesores de vida y resiliencia.