La rana y la cazuela

Oliver Clerc, un joven escritor, traductor y filósofo suizo que utiliza con gran éxito las nuevas tecnologías para difundir su pensamiento, ha divulgado una bella metáfora de la situación social, política y económica actuales aunque niega ser el autor: se titula el síndrome de la rana hervida.

Explica, resumiendo, que si colocamos una rana dentro de una cazuela llena de agua y la calentamos lentamente al animal esto le parecerá bastante agradable y seguirá nadando. El agua pasará de fría a tibia hasta llegar a un punto en el que ya no le gustará tanto, pero no se inmutará, ya que el calor siempre le produce algo de fatiga y somnolencia. La temperatura continuará subiendo hasta resultar desagradable, pero el anfibio ya no se moverá porque se encontrará sin fuerzas y se limitará a aguantar y a tratar de adaptarse. De esta forma, poco a poco, la rana acabará hervida y morirá sin realizar el menor esfuerzo por salir de la cazuela.

Sin embargo, continúa el relato, si sumergimos a una rana en una cazuela con el agua a 50º, de un solo salto se pondrá a salvo fuera del recipiente.

La enseñanza que se deduce aplicada al día a día es clara: un deterioro tan grande de derechos y posibilidades como el que sufrimos a nuestro alrededor en la actualidad, al ser tan paulatino en tantos frentes, no sólo pasa casi inadvertido la mayoría de las veces, sino que no suscita reacción, ni oposición, ni apenas rebeldía por nuestra parte? tan sólo resignación, mientras que las injusticias, el empobrecimiento y la desigualdad se apoderan de la mayoría y sólo unos pocos acaparan cada vez mayor riqueza.

Ya lo decía William George Ward en el siglo XIX: "El pesimista se queja del viento, el optimista espera que cambie; el realista ajusta las velas".

Que cada cual se responda dónde está: si al lado de los que sólo critican, de los que esperan los brotes verdes resignados o de los que se han reinventado a sí mismos, ponen al mal tiempo buena cara y son los mejores empresarios de su propio futuro.

La vida está llena de ranas y de cazuelas a nuestro alrededor. Hay que elegir entre acción o cocción?