La oposición critica el desalojo de un grupo de feriantes de etnia gitana

El concejal de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Barruecopardo, Francisco Martín Casado, ha mostrado sus críticas hacia el alcalde en este diario por haber ordenado el desalojo de un grupo de feriantes que se habían asentado en el municipio con motivo de la celebración estos días de la fiestas patronales.

Este hecho lo ha comentado con otros miembros de la oposición calificándolo de un acto de "racismo", porque "admiten a unos y a otros no, y a estos porque son gitanos los han echado del pueblo. No ha habido motivo ninguno. Ha sido una sorpresa para los feriantes", añadía. Antes de que la Guardia Civil informara a los feriantes de que no se les permitía el asentamiento en el casco urbano, Martín Casado sugirió al teniente de alcalde que instara a los feriantes a cambiar de ubicación, a lo que le contestó que "el alcalde había ordenado que abandonaran el pueblo".

Según el concejal de C's, el teniente de alcalde habría evitado dar explicaciones a los feriantes por temor a represalias, actitud por la que Martín Casado ha mostrado su sorpresa en tanto que "llevan viniendo un montón de años y nunca se han metido con nadie ni han robado nada", palabras que no coinciden con las manifestaciones del teniente de alcalde ni del alcalde que aseguran que toman como propia la luz y el agua del municipio, sin autorización alguna, además de adentrarse en viviendas particulares y en la residencia de mayores.

Martín Casado propuso a los feriantes que solicitaran autorización al Ayuntamiento al día siguiente y que se trasladaran a las afueras del municipio, concretamente a la zona de la gasolinera, aunque finalmente desistieron de la propuesta y abandonaron el pueblo, pero insistía en que "todos los años han venido y no han necesitado pedir permiso".

Por su parte, el alcalde, Jesús María Ortiz, argumentó la decisión en el acuerdo adoptado por el equipo de Gobierno del Ayuntamiento del PP "porque el año pasado se presentaron, no pidieron permiso, robaron la luz al pueblo, dejaron una avería importante, robaron el agua y se metieron en casas de gente mayor, en las cocinas, en todos los sitios. Este año cuando han venido, los cinco bares del pueblo criticaron la situación porque se les permitía la venta de bebidas, botes y otros productos y estaban haciendo una competencia desleal a los establecimientos del pueblo".

Asimismo, Ortiz rechazó que la decisión obedeciera a cualquier motivo racista o xenófobo, y recordó que "un año más, sin pedir autorización, se presentan enganchando la luz en la residencia esta tarde, enganchado el agua a un grifo donde están los juegos de los niños, y que lo dejan bloqueado; y allí hacen de todo. Así que este año, mandé al alguacil para decirles que habíamos decidido que no se les iba a autorizar estar allí, porque tampoco pagan ninguna tasa, y si encima de no cobrarles nada?".