CIUDAD RODRIGO | La sesión de risas había arrancado previamente en el Patio de Los Sitios con El pillo, de Cascai Teatre
La Feria de Teatro apostó este año por programar a Spasmo Teatro en un horario 'afterhours' para lo que suele ser la programación de la Feria (a la 1 de la madrugada), pero la compañía salmantina volvió a arrasar en todos los sentidos.
Si el día de inicio de la venta de entradas, fueron una vez más los primeros en quedarse sin papel (apenas se tardaron 40 minutos en vender sus entradas), en la noche del jueves triunfaron en el Teatro Nuevo Fernando Arrabal, encandilando a todos los espectadores con su nuevo espectáculo, Galerías Tonterías, en el cual se recrean distintas situaciones habituales en los grandes centros comerciales.
Por cierto, que si el día de inicio de la venta de entradas, hubo personas que se pusieron a la cola 5 horas antes de la apertura de la taquilla, en la noche del viernes, la misma persona que aquel día se colocó el primero, volvió a situarse en primera posición de la cola a las puertas del Teatro Nuevo tres horas antes del inicio de la función.
Spasmo arrancó carcajadas continuas en el Teatro Nuevo, al igual que había hecho previamente en el Patio de Los Sitios el montaje El pillo, de la compañía Cascai Teatre. Este espectáculo, en el cual el protagonista casi absoluto es Marcel Tomas, se alternaron la música, los gestos, el teatro de objetos, audiovisuales e improvisación en directo.
El protagonista de la obra fue metiendo durante toda la misma diversos elementos relacionados con Ciudad Rodrigo, como Fuentes de Oñoro, o el Ciudad Rodrigo Club de Fútbol, respecto al cual 'anunció' que la próxima temporada subirá a 2ª División.
Concluida la parte de la obra en sí, Marcel Tomás añadió varios extras, como sacar a una chica del público para realizar un sketch (previamente ya había subido al escenario a otro espectador), una reflexión semántica sobre la palabra 'cojones' y todas sus variantes, o cantar una canción con mensaje final como despedida.
Hay que apuntar que este espectáculo comenzó con un cuarto de hora de retraso porque se esperó a los programadores que habían estado viendo en la Sala Esmark El avaro, que se demoró respecto a lo inicialmente previsto. Por ello, antes de que finalizara todo el show en Los Sitios, unos cuantos espectadores, sobre todo programadores, salieron del lugar para dirigirse con tiempo al Teatro Nuevo a ver a Spasmo.