La sociedad española y el abandono de la cultura

Entre los múltiples lacras que asoman en la sociedad española destacan la insuficiencia educativa de los españoles reflejada en la importante tasa de abandono escolar, el rechazo del sacrificio por el estudio y el desprecio general por la cultura.

Un porcentaje muy importante de españoles, según las encuestas, no ha leído un solo libro en su vida, e incluso entre los jóvenes universitarios existe una especie de alergia a la lectura de libros si no los obliga a leer el profesor. Pero no solo eso, en la época reciente de "vacas gordas", muchos padres aconsejaban a sus hijos que dejaran de estudiar la enseñanza secundaria obligatoria porque iban a ganar mucho dinero como peones de la construcción. Ahora que se pinchó la burbuja, una parte de aquellos jóvenes que abandonaron al calor del dinero fácil se ven en la necesidad de obtener siquiera un pequeño título con el fin de poder encontrar un trabajo.

El desprecio crónico a la cultura lleva a mucha gente a justificar el pirateo de películas o canciones con el argumento de que son muy caras y sin embargo, a nadie se le ocurre protestar por el precio de las entradas de futbol o las de un concierto de un ídolo musical. En este clima tan triste no tiene nada de particular que las instituciones culturales, las asociaciones que se desvelan por llevar una labor cultural a la ciudadanía vegeten por falta de socios, dinero y ayudas públicas.

El incremento del IVA al 21% en los libros electrónicos como si fueran un gadget de frikis y no un instrumento cultural y educativo fundamental, la generalización del mismo 21 % para los espectáculos culturales o incluso para gran parte del material escolar condena a muchos ciudadanos a reducir su asistencia al teatro o al cine. En España no cambiará la sociedad si no es a través de la mejora de la educación y la cultura de sus ciudadanos. La gente habla mucho del modelo educativo finlandés o de cualquier otro país pero no se preocupa, ni se interesa por mejorar el nuestro. Se critica sistemáticamente a los profesores y cualquier ignorante proclama tonterías sobre lo malísimas que son nuestras universidades. Es necesario que los españoles cambiemos esa mentalidad unamuniana "Que inventen ellos" y nos dediquemos a apoyar todos los esfuerzos en el campo educativo y cultural para reformar nuestro país, empezando por la educación de nuestros hijos.

Ahora mismo que estamos en pleno proceso electoral no he oído todavía a ningún candidato al Ayuntamiento de Salamanca que se esforzarán por apoyar la cultura y las asociaciones culturales como el Ateneo de Salamanca de gran tradición que pasa por enormes dificultades, sin que partidos y ciudadanos ayuden económicamente esa gran institución salmantina.