Nos vamos de vacaciones

Por fin están aquí nuestras vacaciones. En unos pocos días nos vamos de viaje, al campo, a la playa, a otro país. Pero ¿ qué vamos a hacer con nuestro perro o nuestro gato?
En el caso de los gatos, si el período de vacaciones no va a ser muy largo, es mejor dejarlo en casa, en su territorio conocido, y buscar a algún familiar o amigo que lo visite y le proporcione los cuidados básicos y algún que otro mimo. A los gatos no les gusta viajar y sufren con los cambios, se estresan mucho.
Si no queda otro remedio que llevarlo, hay que considerar que tardará al menos una semana en adaptarse a su nuevo lugar, y eso dependerá también del carácter del gato porque los hay más o menos asustadizos, y siempre, mucho cuidado con el riesgo de que escape al encontrarse en un sitio desconocido.

¿Y los perros?

Lo primero será buscar, en el sitio al que pretendamos viajar un alojamiento donde lo admitan y enterarnos de los requisitos de vacunación y demás que se exigen. En España, hay diferencias entre Comunidades Autónomas, en algunas la vacuna de la rabia es obligatoria con carácter anual y en otras es cada dos años.
Si vamos a viajar a otros países, debemos enterarnos de manera exhaustiva de todos los requisitos legales para no encontrarnos con sorpresas desagradables. Tener al día el Pasaporte, vacunaciones, desparasitaciones, etc. Y no olvidar que unos días antes el veterinario tiene que rellenar el certificado sanitario que está en el pasaporte conforme el animal goza de buena salud.

Si se viaja en coche y el perro no va en trasportín, hay que cuidar de llevar un sistema tal que no pueda pasar de ninguna manera a la parte delantera del coche, por su seguridad y la de los demás ocupantes y para evitar multas.

Si no puedes instalar barrotes de separación, existe un cinturón específico que se puede comprar en cualquier parte, que lo sujeta del arnés al anclaje del cinturón para que vaya cómodamente en el asiento trasero y seguro, también es importante que no asome la cabeza por la ventanilla, no solamente por los obstáculos sino por la otitis o conjuntivitis que podría producírsele y parar cada dos o tres horas en una zona adecuada para que el animal estire las patas, beba y haga sus necesidades y para evitar mareos, es mejor no darles de comer antes del viaje.

Cada vez son más los alojamientos: hoteles, casas rurales, particulares, etc... que admiten mascotas, y gracias a las campañas animalistas, las playas que también los admiten, solo hay que buscar en internet y querer disfrutar de nuestras vacaciones con nuestros mejores amigos, ellos también se lo merecen, nos aguantan cada día!!!!!

¡Feliz verano a todos!