Satse denuncia que Sacyl cerrará 64 camas del Hospital Clínico y el Virgen de la Vega

El Sindicato de Enfermería, SATSE, de Castilla y León desmiente las informaciones difundidas por Sacyl a los medios de comunicación respecto al cierre de camas en los hospitales este verano y este Sindicato asegura que se cerrarán unas 688 en todos los centros hospitalarios de la Comunidad.

Ya en Salamanca, se cerrarán 64 correspondientes al Clínico y al Virgen de la Vega, mientras que Soria se cerraba la planta de Urología (28 camas) y en Valladolid se contabilizan 208 camas cerradas, a la vez que en Zamora se les comunicará mañana a los representantes de los trabajadores los cierres que se pueden producir en su Complejo Asistencial.

Sacyl ha informado de que no se cerraría ninguna cama en los hospitales del Bierzo, Medina del Campo y Segovia y en el último de estos centros permanecen cerradas (ya desde hace varios años) 48 camas del total de que dispone el centro, mientras que en el Hospital berciano se cerraron el 26 de mayo, tras las elecciones municipales y autonómicas, las 36 camas que se habían reabierto en invierno por necesidades de ingresos de pacientes. En el caso de Medina del Campo no es cierto que cuente con todas sus camas operativas, puesto que como ha denunciado SATSE en junio, se cerró la planta de Cirugía, que cuenta con 26 camas.

Según los datos recabados por SATSE en cada una de las provincias y centro a centro, en el Complejo Asistencial abulense habrá este verano más de 100 camas si utilizar, en Burgos serán 89 las clausuradas y en León serán 95, mientras que Palencia este año no dispondrán de 38 camas.

SATSE rechaza que se intente engañar a la población con cifras que no son ciertas y que de nuevo se produzca un recorte de la asistencia a los pacientes, que sólo puede traducirse en un aumento de la carga asistencial de los profesionales sanitarios que trabajan en verano y en un deterioro de la asistencia sanitaria porque de nuevo tenemos que asistir a traslados de pacientes entre unidades que no son las que les corresponden por sus dolencias y a que se intente efectuar un ahorro económico a través de esa asistencia que se debe prestar.

SATSE niega que se produzca una reestructuración de camas por que se reduzcan las necesidades asistenciales, sino que esta reducción en el número de camas disponibles sólo obedece a criterios económicos, algo inadmisible cuando seguimos padeciendo listas de espera en numerosos servicios.