El primer paso

De las cosas más emocionantes que pueden suceder en un Centro Infantil, sin duda alguna, la graduación de los que se marchan "al cole de los grandes" ocupa os primeros puestos.

En un centro se viven los primeros pasos, el paso a comida solida, las primeras palabras con "lengua de trapo", y mil cosas más, pero si hay algo que emociona a cualquier educadora, es poner a sus peques la beca y que posen contentos (o aterrados por miedo escénico) mostrando su orla, para la última foto antes de ser mayores.

Son meses lo que se tarda en preparar algo así. La actuación delante de los "papis y mamis" es de las cosas más difíciles, hacer el gorro y vigilar que o se caiga los adornos para ese día?porque ese día es especial y el centro también se engalana?

Es difícil para todos un día así, no sólo por el cansancio de los preparativos, la carga emocional es enorme. Son niños que han estado a tu lado los primeros tres años de su vida y una media de 6 horas al día, ¿Cómo no los vamos a querer? es imposible no hacerlo, y se marchan, salen del cascarón para enfrentarse a otro mundo, bonito también pero quizás no tan cercano y especial.

Hablando de emociones, no puedo dejar de hablar de las lágrimas?las de las familias, educadoras y niños se mezclan en una combinación rara de sentimientos que van del miedo a la alegría pasando por la tristeza. Y aún con todo eso, es un día que no se olvida.

Por todo ello y desde estas líneas, mi más sincera enhorabuena a los nuevos graduados del curso 2014/15 y a sus familias que han sido geniales compañeros de viaje, sin olvidarme por supuesto, de esas educadoras excepcionales que año tras año se dejan la piel para que este día no sea un día cualquiera, para que sea el día del comienzo de otra etapa y que se sientan fuertes y preparados para ella.

Enhorabuena graduados, a vivir la vida, ¡¡¡a comerse la vida!!!

Este ha sido sólo el primer paso?.encantados de haberlo dado juntos?