¿Todo ha cambiado para que todo siga igual?

Hoy día 25 de mayo de 2015 todo son conjeturas sobre los pactos que se pueden realizar desde la "izquierda" para poder echar del poder a los candidatos del PP que por lo dicen los resultados, han vuelto a ganar las elecciones, pero sin mayoría absoluta, como lo hacían en las anteriores elecciones. No obstante, hay que reseñar varias consideraciones que son, a mi modo de ver, importantes para poder entender, desde posturas inconformistas, lo que los españoles votaron ayer día 24:

1. Los que pedían que la contestación en la calle de los últimos años se presentara a las elecciones, ya han tenido su respuesta: muchos votantes les han dado la espalda y aquellos, han perdido cientos de miles de votos que se han traducido en la aparición en escena de nuevas formaciones políticas que se han llevado los votos que los otros despreciaron.
2. El PP sigue siendo la opción más votada en toda España, pero de manera muy desigual ya que en Cataluña, País Vasco y Navarra su incidencia ha sido casi testimonial. Por ejemplo, de los casi 7000 de concejales que se elegían en Cataluña, el Partido popular sólo ha conseguido 214. En Navarra y el País Vasco ha sido parecido, lo que habla bien a las claras que no es bien recibido en las comunidades llamadas históricas. El Partido en el Poder político está yendo a la deriva, no ha sabido esconder ni aceptar sus errores, sobre todo la corrupción, ha pensado que hacer el avestruz era suficiente y se ha encontrado que al sacar la cabeza el panorama había cambiado demasiado y al mirarse en el espejo se ha visto las arrugas de viejo pasado de fecha. Lo peor es que aún tienen 6 millones de votantes que les perdonan, o mejor, que son conniventes con sus políticas y su corrupción, o lo que es lo mismo, viven en, por y para ella. Ya se ve, mucho de ellos son los que llenan las playas, los restaurantes y campos de futbol, compran coches de alta gama o nunca de manifiestan en las calles para pedir justicia, pan y libertad: son muy españoles y mucho? españoles.
3. El PSOE, mantiene las apariencias a pesar de haber perdido cientos de miles de votos ya que el PP ha perdido muchos más -casi 2.500.000- respecto a las anteriores. Ambos han pagado las consecuencias de una corrupción política demasiado evidente, tan claro como que, a pesar de ello, sigue habiendo demasiados votantes que les perdonan sus? llamémosles "deslices", lo cual no es bueno para nadie, pero demuestra que los cambios bruscos son muy escasos debido al miedo al vacío o que aquello de? "más vale lo malo conocido?" sigue siendo válido.
4. Las opciones ciudadanas han tenido un apoyo sorprendentemente masivo en Cataluña, Madrid o Galicia, otro dato muy a tener en cuenta, ya que estas formaciones locales no van a presentarse a las generales de igual manera y entonces muchos de estos votos tendrán que buscar cobijo en alguno de los partidos nacionales. Podemos, por su parte, lleva un recorrido mucho más lento de lo que algunos pensaban y su famoso asalto al poder le va a costar tiempo y que algún miembro más deje sus filas y Ciudadanos ¿o debo decir Ciutadans? va a lo suyo: intentando hacer en el resto de España lo que no pudo, ni puede, hacer la Cataluña que le vio nacer.
5. A pesar de que, como dije en mi artículo del pasado domingo, la abstención sigue siendo ignorada por los medios de comunicación o denostada, cuando no, notoriamente insultada, por los partidos que se dicen de izquierdas como la causante de que el poder siga en manos de la derecha -cosa como poco discutible- a pesar de todo, digo, dicha abstención ha sido de la nada despreciable cifra de más 12 millones posibles votantes, el doble que el partido más votado. Este incontestable y desafiante hecho parece que no entra en los cálculos de los partidos mas que para justificar sus resultados o para decir que la abstención "está de acuerdo con el poder", argumento que se cae por su propio peso para cualquier persona que no esté interesada en colaborar con un sistema caduco, injusto y corrupto, como poco. Es verdad que toda la abstención no es igual, que su compromiso político tiene muchísimos matices, pero se ha visto y se ve que muchas de las personas que más compromiso tienen con la vida política y/o ciudadana son abstencionistas, sin desdeñar a todos los que, hartos de que el sistema le ahogue, hayan decidido no colaborar con él. Un ejemplo de la dictadura del voto: el día de las votaciones está prohibido exhibir rostros de los candidatos, hacer campaña electoral y un sin fin de acciones lógicas, pero no lo está llamar abiertamente a votar desde cualquier medio o ver y oír las impresiones de los candidatos en los informativos de cualquier cadena Tv, radio o prensa escrita. ¿por qué no se toma la abstención como otra opción? Simplemente porque si la hubiera en mayor cantidad que los votos emitidos, las elecciones no estarían legitimadas, a esto es a lo que más miedo tiene el poder y los partidos políticos: a que las decisiones no se tomen por los cauces que ellos han pensado, a que las plazas, las calles y los locales públicos no se llenen de gentes informadas y con cultura solidaria que quieran decidir su propio destino en paz y en libertad.
6. Dado que los verdaderos dueños de este tinglado no se presentan a las elecciones, ni a las municipales ni a las generales, ¿cuándo vamos a tener agallas suficientes para actuar y convertirnos en verdaderos dueños de nuestro destino? ¿seguiremos teniendo fe en el sistema? Posiblemente ahora más que nunca sea cierto aquello de? "que todo cambie, para que todo siga igual".

Victorino García Calderón

Foto: Alex López