¡NO! adverbio de negación

Corría el mes de marzo de 2011, las elecciones municipales estaban a la vista: el día 22 de mayo de aquel año, los españoles deberían elegir a sus representantes en las corporaciones locales y autonómicas, pero la tediosa campaña electoral se vería alterada cuando unos cuantos jóvenes de ambos sexos, hartos de los modos y maneras de abordar la llamada crisis por la clase política dominante, decidió ocupar pacíficamente durante todos los viernes de ese mes, y de los siguientes, la Plaza de los Bandos de la ciudad de Salamanca, llamando así la atención de los viandantes sobre el comportamiento poco o nada democrático de los llamados representantes del pueblo. Lucían pancartas rudimentarias de papel blanco (formato DIN A-2, principalmente) en las que escribían con rotulador todo aquello que les preocupaba: la representatividad en las cortes, la corrupción, la devolución del dinero dado los bancos? también incitaban a los viandantes a escribir sus quejas en un papel continuo extendido en el suelo en el que los más atrevidos iban exponiendo su malestar que, por entonces, iba creciendo día a día.

Aquello parecía inofensivo, incluso había personas que se lo tomaban en plan festivo, pero como quiera que en las redes sociales, a medida que avanzaba el mes de abril, la cosa se iba calentando y empezaban a llegar noticias de que a nivel nacional se había convocado una movilización general para el mes de mayo, los medios locales empezaron a tomarse más en serio el incipiente movimiento ciudadano. Por un lado la derecha empezó a ponerse en guardia y se dedicó a insultar a los "indignados" jóvenes (cosa muy común cuando hay algo que les hace daño) llamándolos "perro-flautas", desarrapados, mal-olientes o "anti-sistemas" que no tenían donde caerse muertos, por otro, la "izquierda", que aun estaba en el poder, los veía con una mezcla de expectación y curiosidad, pero también como un golpe bajo al "zapaterismo", de modo que recibieron lo suyo antes de que "aquello tomara fuerza".

Es obvio que ambos, derecha e izquierda, se equivocaron en las apreciaciones, aquel descontento fue en aumento y desembocó en el éxito mas rotundo que un movimiento ciudadano ha tenido en muchísimos años: la increíble -por lo que tuvo de espontánea- manifestación de protesta y posterior desafío callejero con acampadas en las plazas de toda España y muchos países del extranjero. Había nacido el llamado el 15-M, pero había nacido gigoló-puta o viceversa, quien más y quien menos se lo ha apropiado, usado o ha abusado de él, unos, la derecha (ahora en el poder) mediante la llamada "LEY MORDAZA", en un gesto evidente de acabar con las libertades que pudieron propiciar dicho movimiento y la "izquierda" que ha intentado convertirlo en un partido más, intentando acabar por las malas, unos, o por las buenas, los otros, con la única posibilidad que teníamos de avanzar políticamente en pleno siglo XXI en el duro camino de las relaciones de los seres humanos.

Afortunadamente parece que el 15-M no ha muerto del todo y el pasado viernes se volvieron a oír las consabidas frases de "NO NOS REPRESENTAN", "NO MÁS DESAHUCIOS", "ESTA CRISIS ES UNA ESTAFA" "LO LLAMAN DEMOCRACIA Y NO LO ES"? a las que se ha añadido "NO A LA LEY MORDAZA", la Puerta del Sol ha vuelto escuchar estas frases y se ha convocado en la misma plaza, una jornada "de grito mudo" prevista para el próximo día 23 de mayo, día de reflexión antes de las semejantes elecciones que se realizaron hace exactamente cuatro años.

Cierto es que no es igual que entonces, alguien se ha encargado de dar al traste con semejante "desatino", por tanto, no debemos decir a nadie lo que tiene que hacer el próximo día 24, algunos haremos caso a Brassens y nos quedaremos en la cama igual, porque igual nos da esta democracia que la música militar. El señuelo está lanzado, el señuelo siempre es inalcanzable, la libertad, la democracia, la igualdad y la justicia plenas son quimeras, y por tanto, inalcanzables. Pero el anzuelo de la urna lleva un gusano llamado FE. Fe en la quimera que, algunos perdimos hace tiempo -menos mal- y que lamentamos haberla tenido, lo mismo que lamentamos el tiempo perdido desgraciadamente, pero es la hora de recuperarlo, y lo primero que haremos es no picar en el anzuelo, y lo segundo, seguir hacia adelante hasta que las fuerzas nos acompañen y aún más allá, si fuera posible. Que cada cual aguante su vela y por favor, pedimos respeto para una decisión que usamos millones de personas, ya que habrá más abstenciones que votos tendrá cualquier partido, y que a pesar de que seamos tan invisibles que ni en las encuestas, ni en los resultados del día 24, nos tengan en cuenta, no contribuiremos más con este desastre. Y no nos tienen en cuenta porque es a lo único que les tienen miedo todos los "demócratas" (los viejos y los nuevos), es lo único que temen: que sean elegidos solo por unos poquitos, por eso ellos sí os dirán lo que tenéis que hacer: ¡¡VOTA LO QUE QUIERAS, PIÉNSATELO TANTAS VECES COMO QUIERAS, PERO VOTA!! Así es cómo intentan dirigir nuestros pasos. Así es como diremos ¡NO! antes y después del 24.