“La falta de reivindicación del PP ha hecho que la Universidad y el Hospital estén en una...

"La falta de gestión, eficacia y reivindicación del gobierno municipal del PP ha hecho que estén en una situación muy delicada entidades esenciales para Salamanca, como la Universidad o el Hospital, que carezca la ciudad de políticas activas de empleo y de reactivación empresarial y que hayan seguido reduciéndose la participación ciudadana y las políticas sociales". Son palabras de Enrique Cabero (Salamanca, 1966), el candidato del PSOE a la alcaldía de la capital charra.

Profesor titular de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social de la Universidad de Salamanca, fue Vicerrector de Asistencia al Universitario de la USAL de 1994 a 2000, año en el que fue nombrado Coordinador General del Consorcio Salamanca 2002, que organizó los actos de la Ciudad Europea de la Cultura.

Ahora, con cuatro años de experiencia política en la oposición municipal, está convencido de que este proyecto socialista "desde el progreso y la izquierda" es "el cambio seguro que Salamanca necesita".

¿Qué le llevó a asumir este reto político?

La decisión de la militancia del Partido Socialista de Salamanca, manifestada en unas primarias, me ofrece la portunidad de conseguir que Salamanca, la ciudad en la que nací y en la que siempre he vivido, que se encuentra en una situación muy difícil, inicie el cambio que necesita para frenar el deterioro al que le están llevando tantos años de políticas equivocadas del Partido Popular.

¿Qué le dijo su familia?

Tengo la suerte de contar con una familia muy comprensiva y que me ayuda mucho. Realmente supone una continuación del intenso trabajo que vengo desempeñando como portavoz del Grupo Municipal Socialista, compaginado con mi actividad como profesor de la Universidad de Salamanca.

¿Renuncia a una parte de su vida personal por este compromiso?

Naturalmente. Asumir una responsabilidad como esta, encabezando la candidatura del Partido Socialista y, con ello, un proyecto serio, seguro y eficaz para Salamanca, requiere una gran dedicación que, sin duda, afecta a la vida personal y profesional.

¿Cómo es un día en su vida cotidiana combinando su trabajo en la USAL, sus citas políticas y su entorno familiar?

A veces, de broma, a las personas más cercanas les digo que es un sinvivir, pues al final todo el día está escrito en una agenda exigente. Pero no es así. Compensa el esfuerzo, ya que la política entendida como servicio público, a la ciudadanía, a tu ciudad, supone una tarea dura pero fundamental.

¿Duerme muchas horas?

Duermo poco, menos de lo que debiera, ciertamente. En todo caso, lo que duermo procuro aprovecharlo.

¿Agradece los momentos de soledad?

Dedico mis momentos de soledad a leer, estudiar, escribir y pensar. Debe evitarse que la prisa impida perder el contacto con la realidad o equivoque los objetivos y la reflexión ayuda a lograrlo.

Sus resultados en las anteriores municipales no fueron buenos. ¿Qué aprendió de esa experiencia?

Las elecciones de 2011 llegaron en un mal momento para este partido. Se constituyó, no obstante, un Grupo Municipal Socialista que ha hecho un trabajo útil y eficaz para la ciudad. En todo caso, la profunda autocrítica realizada y las transformaciones internas permiten ahora ofrecer un proyecto renovado desde el progreso y la izquierda, el cambio seguro que Salamanca necesita.

¿Qué ha cambiado desde entonces en la propuesta del PSOE para que la elijan los salmantinos?

Se ha renovado ampliamente el partido y se ha actualizado su programa. Este proyecto renovado se ajusta plenamente a las necesidades y demandas de la sociedad salmantina. Ofrece soluciones realistas a los principales problemas de la ciudad, especialmente en relación con la creación de empleo y actividad empresarial, así como para el blindaje de los servicios públicos y de las entidades y sectores en los que Salamanca destaca.

¿Qué ha hecho mal el PP en estos cuatro años en el Ayuntamiento?

Considero que este mandato municipal ha quedado en blanco. Se ha perdido un tiempo muy valioso para que Salamanca recupere su iniciativa y su liderazgo en ámbitos muy importantes. La falta de gestión, eficacia y reivindicación del gobierno municipal del PP ha hecho que estén en una situación muy delicada entidades esenciales para Salamanca, como la Universidad o el Hospital, que carezca la ciudad de políticas activas de empleo y de reactivación empresarial y que hayan seguido reduciéndose la participación ciudadana y las políticas sociales.

¿Y qué ha hecho bien?

Esta es una pregunta difícil de contestar porque la gestión ha sido muy mala. Seguramente han acertado sobre todo cuando han rectificado decisiones adoptadas por ellos mismos, normalmente a propuesta del Grupo Socialista, como la devolución del IBI cobrado indebidamente.

¿La proliferación de candidaturas puede diluir el voto del cambio?

No necesariamente. El pluralismo político siempre es positivo y enriquece el debate.

¿Qué destaca de su programa, cuál su principal aportación?

Me parece que es dar prioridad absoluta a la creación de empleo, la reactivación de los sectores empresariales básicos, la defensa y el incremento de las actividades en las que Salamanca sobresale (Educación-Universidad, Sanidad-Hospital, Cultura-Patrimonio-Turismo, Ciencia-Español) o puede sobresalir (Empleo-Empresa-Trabajo Autónomo, Igualdad efectiva-Participación, Innovación social-Envejecimiento activo, Economía Social-Desarrollo), para abrir nuevas oportunidades y yacimientos de empleo para las personas jóvenes y parados de larga duración y conseguir una ciudad de bienestar.

¿Qué influye más en los votantes, lo más reciente o una lectura global de la legislatura?

Depende. Sociólogos y politólogos tampoco se ponen de acuerdo. Al final el voto se debe a una decisión personal basada en un conjunto complejo de factores diferentes de unas personas a otras y de unas situaciones a otras.

¿Cómo será la campaña del PSOE?

Será una campaña participativa, realizada con la ciudadanía, para explicar con claridad, sin alharacas ni excesos, el proyecto renovado de cambio seguro y eficaz que se ha construido también con una amplia participación.

¿Qué le diría a los que desconfían de los partidos hasta ahora mayoritarios?

Que el PSOE y el PP, así como sus programas y lo que representan, son muy distintos, como se viene demostrando desde la transición, sobre todo en materia social y laboral, en la concepción de la igualdad y los servicios públicos y de la propia política. Que en tiempos difíciles para Salamanca fue un gobierno municipal progresista, con el alcalde socialista Jesús Málaga a la cabeza, el que consiguió, con la participación de la ciudadanía y el movimiento vecinal, una Salamanca renovada en profundidad, con mejores infraestructuras, y servicios, y abrió nuevas oportunidades. Y que ahora, en otro momento muy difícil, resulta imprescindible un cambio que el Partido Socialista está en condiciones de liderar e impulsar, como entonces.