La sorprendente política arboricida de zonas verdes

Esta semana se abrió al disfrute ciudadano el nuevo espacio verde junto al rio Tormes, entre el regato del Zurguén y el puente de Salas Bajas. Indudablemente es verde dado que el césped apunta maneras, luego hay unos palitos que entiendo que en algún momento llegarán a ser árboles. Sorprende la prisa por hacerse una foto aquí por parte de nuestro alcalde, de hecho parece haber participado en algún maratón fotográfico que no he visto convocado.

Continuando con mis incomprensiones, no entiendo cómo para crear una zona verde, o arreglar un parque, siempre hay que destruir árboles maduros ya existentes. Aquí cortaron la colección de chopos que había en la orilla del río. Ahora que recuerdo, alguien dijo una vez que no eran árboles urbanos. En realidad no veo que ningún árbol lo sea, como mucho adaptamos especies a un espacio tan artificial como es el de las ciudades. Si seguimos el silogismo, habría que destruir todos los árboles que hay en Salamanca, no son urbanos.

Otro motivo es el de sus enfermedades. Todo parece indicar que padecemos una plaga de grandes proporciones, en especial junto al río. No sé si los de la Plaza de Garrido también, quizás "cocheritis". Incluso ocurre en el cuidado parque de La Alamedilla. Y existen problemas de edad, ya hemos oído decir a nuestros munícipes (expertos en la materia) lo que les pasa a los árboles cuando cumplen más de 20 años, que piden a gritos que los corten. Existen teorías municipales más elaboradas, como aquella del chupa-chups de la Gran Vía (si dejas a un árbol sin raíces, se cae, pero ¿quién le quita las raíces, quizás alguna obra mal planeada a propósito?).

Total, que siempre algún árbol grande y maduro, es decir, que proporciona abundante sombra y combate la contaminación, acaba cayendo. Luego cuando se replanta o se foresta una nueva zona, y hay que reconocer que nunca antes se había hecho tanto a este respecto, no se acaba de ver el mismo interés en poner especies adecuadas al lugar de plantación, por tamaño de acera, o previniendo alergias por ejemplo.

Hace años que andamos detrás de un Plan Especial de Protección de las riberas del Tormes, pero no acaba de arrancar. El que anulen un Plan de estas características por defectos en la tramitación resulta sorprendente. No ya sólo que el Ayuntamiento tenga un equipo de abogados, incluso hay munícipes con esa formación. A veces los defectos son tan estúpidos que se llega a pensar cómo se obtuvo tal titulación, y desde luego no dudo de la capacidad de mi querida Universidad para formar profesionales. No sigo por aquí dado que, no sé el motivo, de repente empiezo a pensar mal, y hago conjeturas del estilo de como si no quisiera alguien que esto saliera adelante. Pero aquí estamos, sin Plan de protección pero haciendo cosas junto al río.

La política arboricida no es exclusiva del Ayuntamiento de Salamanca, en Santa Marta (será que en el Partido Popular se trasmite algún gen que fuerza a esto) también cortan árboles cuando les da por intervenir en una zona verde, como los eternos proyectos en la Isla del Soto. En este caso para construir algo encima, como si no hubiera campo libre, si de verdad fuera necesario edificar en una zona verde.

Volviendo al inicio, recuerdo que cuando la Universidad amplió sus pistas de Salas Bajas, la Comisión de Patrimonio miró con lupa unos vestuarios semienterrados e invisibles, cercanos al actual puente de la Universidad. En el nuevo parque sin sombra han puesto un escenario techado con la Catedral de fondo y, salvo la denuncia de la Asociación en Defensa del Patrimonio, nadie se ha dado por aludido. Yo no sé mucho de esto, pero a los ignorantes impactar sí que nos impacta.

Siguiendo con el analfabetismo que uno tiene, he visto que han modificado sobre la marcha la rotonda dedicada a la, en eterno proceso de extinción, UDS. Los tres carriles interiores se han quedado en dos, coincidiendo con un artículo mío que sugería algo en este sentido. Pero como no creo que lo leyeran, y menos que me hicieran caso, han dejado una extraña e incómoda parada de autobús de la línea 9 en sentido Zurguén.