Paradoja de Podemos

Ignoro cuál va a ser el recorrido de Podemos en las urnas, fundamentalmente en las generales, pero debemos consensuar que el resto de partidos se lo están poniendo fácil, muy fácil. Respecto a la corrupción muy pocos son los procesados que ingresan en centros penitenciarios y, la corrupción institucional sigue campando a sus anchas, como si nada estuviera pasando; sigue el mismo número de concejales, procuradores, diputados y senadores con alguna extraña excepción, como puede ser Castilla La Mancha; siguen los mismos "asesores" con sueldos escandalosos y ha habido un conato de concienciar a la ciudadanía para subir los sueldos de los políticos, mientras tanto siguen los viajes opacos, cómo y dónde quieran sin necesidad de justificación en esta, nuestra democracia vertical, donde los ciudadanos poco tienen que decir, el espectáculo de la alcaldía de Madrid es un buen ejemplo, ya ni siquiera podemos elegir a nuestro alcalde que es, teóricamente, el político más cercano, lo eligen los partidos por razones espurias que a los ciudadanos se nos escapan.

Podemos ya ha arrasado con Izquierda Unida y lleva el mismo camino con el PSOE, ayudado por las actuaciones, extrañas actuaciones, de Susana Díaz. El partido Popular sigue durmiendo en sus laureles y confiando todo a una mejora de la economía que está muy lejos de llegar al ciudadano, ciertamente están mejorando los datos macroeconómicos, más por razones exógenas a la actuación política de nuestro gobierno que por los durísimos recortes establecidos; no es suficiente para restaurar la confianza del electorado de centro derecha que ha sufrido una tremenda decepción con el tema del aborto y otra, no menos importante, con la actuación que el partido ha tenido con Cataluña donde no iba a celebrarse una votación que, finalmente se celebró y donde existe la impresión entre los populares y no populares de que Mas ha vencido al gobierno.

La paradoja de Podemos, tan denostado y perseguido por el resto de partidos, es que habiéndose metido como cuña dentro del proceso soberanista podría acabar con el debate de la independencia que, aún cuando se dice transversal, es principalmente de izquierdas, por lo que le restará votos a ERC, volverá a ganar votos CiU y el abanico parlamentario catalán tendrá muy difícil constituir mayorías, serán necesarios más de tres partidos para ello. Es decir, que paradójicamente, Podemos podría ser la solución temporal e inmediata de lo que se viene denominando el "problema catalán".