La ilusión de revivir y compartir la noche más mágica del año

La ilusión de revivir y compartir la noche más mágica del año, con la esperada llegada de los Reyes Magos, no desaparece con la edad, sino todo lo contrario. Los más pequeños han disfrutado, boquiabiertos en muchos casos, el derroche de magia, ilusión y fantasía que ha acompañado al séquito de sus Majestades de Oriente en su recorrido por las calles y plazas de Salamanca, hasta su llegada a la Plaza Mayor.

Las carrozas y los tronos reales, con un séquito de 450 personas, también han permitido a los adultos recuperar durante unas horas el espíritu y la inocencia de los niños. Mucho público, especialmente familias, a lo largo de todo el recorrido, el cual hemos recorrido para captar las miradas de grandes y pequeños ante la magia que se desplegaba ante sus ojos.

Fotos: Jennifer Hocke