Insoportable

Le había dicho que cuando encontrara un trabajo se casarían. Encontró el trabajo pero fue alargando su promesa y los días iban transcurriendo sin que nada hiciera pensar que se cumplirían sus esperanzas. Cansada de tantas promesas incumplidas decidió abandonarle y realizar su vida, ajena a compromiso alguno. La buscó y cuando la encontró la mató arguyendo que le había abandonado. Se pusieron banderas a media asta en su pueblo y se guardó un minuto de silencio.

Le amaba. A veces en estas historias tendemos a olvidarnos del amor. Habían sido muy felices y tenían dos hijos en común. No recordaba cuando empezó a cambiar todo, primero solo fueron palabras, después llegaron los golpes y los malos tratos continuados. No podía seguir así pero no sabía dónde ir ni qué hacer; además estaban los niños a los que adoraba. Le amaba y no quiso nunca denunciarle, pero un día la paliza fue tan brutal que decidió abandonarle y así se lo dijo en la cocina mientras preparaba la cena. La miró con fuego en los ojos, cogió un cuchillo de la cocina y le asesto una, y otra, y otra y otra puñalada hasta que la dejó muerta en el suelo. Después él mismo llamó a la policía y esperó tranquilamente a que llegara. Volvieron a ponerse las banderas a media asta y esta vez se guardaron tres minutos de silencio.

Se habían separado hace tiempo, pensaba que nunca podría rehacer su vida pero encontró trabajo y pudo salir adelante. Conoció a un hombre que le pedía las cosas por favor, que no la controlaba lo más mínimo, que llamaba a la puerta cuando ella estaba dentro de su dormitorio, que le pedía permiso para amarla, que la mimaba y que la quería. Le parecía un sueño. Un día cualquiera, su ex pareja consiguió entrar en la casa y los mató a los dos. No podía soportar que viviera extraordinariamente bien sin él. Se decretó luto oficial y las banderas volvieron a ponerse a media asta y esta vez se guardaron cinco minutos de silencio.

¡Basta ya! Es insoportable la lacra maldita que hace que nuestras mujeres vayan muriendo una a una en un rosario que ya lleva 58 mujeres asesinadas durante este año, y aún no ha acabado el año.

Los minutos de silencio y las banderas a media asta ya no evitan las siguientes muertes y es por ello que los gobiernos deberían establecer medidas suficientes para acabar con dicha violencia. En todo caso, es una situación absolutamente insoportable, tan insoportable como que en una reciente encuesta las jóvenes justifiquen el hecho de ser controladas por sus parejas, directa o indirectamente a través de las redes sociales, o que ellos admitan que cierta violencia es necesaria y tolerable. Ya es hora de gritar que quien bien te quiere no te hace llorar y que la letra nunca entró con sangre. Cambiemos las cosas.

La educación y el ejemplo son fundamentales en la lucha contra la violencia, machista o no, pero mucho me temo que ya se ha instalado en nuestra sociedad a tenor de las últimas noticias en los diferentes medios, y debemos establecer los cauces necesarios para su erradicación, pues ya es insoportable.