Las obras de la nueva sede de la Policía Local entran en su recta final

El alcalde Javier Iglesias, el primer teniente de alcalde Marcelino Cordero, y la concejal delegada de Tráfico, Adoración Cañamero, se acercaron en la mañana del viernes hasta el antiguo Parque de Bomberos de Ciudad Rodrigo, que está en la recta final de su transformación para convertirse en la nueva sede de la Policía Local en la ciudad.

Las obras tienen un presupuesto de 118.000?, sufragados íntegramente por el propio Ayuntamiento mirobrigense. El objetivo de la intervención es mejorar la calidad en la prestación del servicio de la Policía, así como mejorar las condiciones laborales de los propios trabajadores, dejando atrás las instalaciones actuales situadas en los bajos de la Casa Consistorial, que son, en palabras de Iglesias, "muy deficientes".

En su nueva ubicación, la Policía dispondrá de un moderno edificio de dos plantas que tendrá una parte pública y otra privada. La pública estará situada en la planta baja y se accederá por una de las grandes puertas del antiguo Parque de Bomberos, que será retirada próximamente para dejar visibles dos puertas correderas que ya están colocadas.

En esa parte pública, tras una sala de espera, estará situado un mostrador para atender a los ciudadanos en un primer momento. Justo detrás habrá una sala de espera, y una sala para tramitar denuncias. En esa zona también estará el despacho del Jefe de la Policía, Narciso Caridad, y habrá unos baños.

Respeto a la parte privada, en la parte baja estará la cochera de los vehículos de la Policía. Mientras, en la parte superior, se encuentran los vestuarios y el armero de los 21 agentes con los que cuenta actualmente el cuerpo. Esos 21 agentes están repartidos en 3 turnos de 8 horas cada uno, disponiendo los policías de cada turno de un despacho en la parte superior de la nueva sede.

Además, se ha habilitado un aula de formación, donde se impartirán cursos formativos a los propios agentes, así como sesiones de seguridad vial; y una sala para controlar los sistemas de videovigilancia de los que dispone la Policía. La planta superior se completa con una sala de reuniones, un archivo, un despacho para el concejal de Tráfico, una pequeña cocina y un comedor. En un principio, está previsto que las obras concluyan a finales de diciembre o principios de enero.

Una vez se produzca el traslado de la Policía a su nueva sede, quedará un retén, con un policía de 2ª actividad, en la actual sede en los bajos de la Casa Consistorial. Está previsto que esa zona se habilite como lugar para la Oficina de Expedición del DNI.

Desde el punto de vista de Javier Iglesias, la nueva sede de la Policía Local permitirá, además de mejorar las condiciones de prestación del servicio, "hacer más visible" a esta entidad. El alcalde indicó que "la voluntad del Equipo de Gobierno es mejorar los servicios públicos, para tener un mayor nivel de atención al público".

En el capítulo de obras, el alcalde Javier Iglesias apuntó que las obras de la nueva sede de la Diputación Provincial están también en su recta final.