Conviveniencia

"Dos bandos irreconciliables de necesidades reciprocas. Transformacion del mundo en un campo de batalla. Dos sexos alterados de pura incomprensión. Dos grupos diferenciados únicamente en lo que a todos nos cuelga por dentro o por fuera. El estado convivencia progresaba rapidamente hacia un instinto de supervivencia,?"

Pareciese que hubiera sobrevenido una tormenta de leche en aquel lugar. El blanco nuclear hubiera perdido constantemente la batalla contra la lucidez de aquel sitio donde se alumbraron, a la misma hora y en el mismo día, aquellas criaturas. Allí permanecerían durante 10 años, 10 meses y 10 días. El mismo trato para ambas (Hava y Dam). Según el Doctor Eutorodomo, insigne psiquiatra, habían tenido la fortuna de ser los protagonistas de un experimento cognitivo ? conductual que cambiaría el rumbo de la humanidad. Darían con la fórmula mágica de la convivencia.

Su vida allí consistiría en ejercicios de anti predestinación social, píldoras diarias contra la inmunodeficiencia amatoria y música de Wagner con altas dosis de anti tristeza y alegría al mismo tiempo. Los días pasarían bajo estímulos alérgicos contra los instintos, imágenes neutras repetidas de manera vehemente, tratamientos orientados a un pensamiento anti deslizante y ejercicios de balance equilibrado. Al final, sin ninguna intervención cultural o social y con un control exhaustivo de sus patrones biológicos, no tendrían necesidades, ni sentimientos, ni hábitos. Serian compatibles. Podrían convivir.

Y llego el día 3.650 de su existencia a las 00:00 h., cuando fueron dirigidos y soltados en un perímetro de seguridad denominado "Edén" y compuesto unas 1.500 hectáreas de monte bajo, especies arbóreas de todo tipo y repleto de animales. La disposición la fue la misma para ambos, en la misma latitud y altura equidistante a unos 36,5 kilómetros el uno de la otra. El cinematógrafo de las estaciones seria testigo climático de sus vidas.

La vida para ambos hasta los 15 años fue pura cuestión de estancia, vagando a duras penas en un perímetro radial de un kilómetro a la redonda, fuera de todo sentimiento, necesidad y pensamiento que no hubiese sido programado en aquel lugar donde pareciera que hubiera sobrevenido una tormenta de leche.

Pero fue un día cuando Hava, haciendo saltar sus niveles de curiosidad, descubrió unos pequeños dispositivos distribuidos cerca del lugar donde habitaba. Los miro e inmediatamente desactivo, sintiendo algo parecido a lo que llaman culpabilidad, aunque no podría ser, no se lo habían enseñado. De repente en la torre de control, saltaron las alarmas, el equipo del Dr. Euterodomo no fue capaz de manejar la situación. Una semana después ella lograba situarse frente a Dam. Una mezcla de curiosidad y astucia no aprendida, le habrían llevado hasta allí de manera incontrolada. El: desamparado, desnudo y solo, había podido sobrevivir en aquel lugar a base de la desprogramación de aprecio que tuvo lugar durante sus diez primeros años y sus mecanismos de autorregulación de necesidades básicas. Ella lo acompaño a desactivar los sensores de control, sin que esta segunda vez, tuviera sentimiento de culpa. Lo abrazo. Increíblemente, por primera vez él sintió algo. Se sintió reconfortado.

Habría que abortar el experimento. Todavía no estaban preparados para conocerse. Aquella misma madrugada la patrulla de intervención y control conductual salió a por ellos. Pero fue infructuoso. La primera de sus tácticas, intentando seducir a Dam para alejarlo de Hava a través una de las integrantes que inmediatamente sufrió el instinto incontrolado de posesión cercano a la locura de esta última, lo que hizo imposible la fuga. Acto seguido, Hava convencería a Dam para defender lo que en ese momento había nacido entre los dos. El con sus niveles de aprecio desorbitadamente elevados, salió y aniquilo a cada uno de los miembros del grupo. Regreso con Hava, encontró comprensión y reconocimiento a su fuerza y destreza. Esta lo abrazo y lo retribuyo,?

Y de la recompensa, nació la descendencia. Y durante tiempo siguieron bajo la protección inteligente de ella y la fuerza bruta de él. Hasta que el calendario provoco que la indiferencia de ella fuera creciendo paulatinamente al tiempo que el odiable brusco incontrol por parte de él, ponía de manifiesto la poca inteligencia masculina. Poco después, una rueda de gran astucia femenina y más fuerza bruta de él,? Después de la alegría, convino la soledad y tras 10 años, 10 meses y 10 días mas, la convivencia se volvió a convertir en supervivencia.

Y aun con poca lucidez por ambos, convinieron en activar los sensores, con el fin de que volvieran a ser controlados, que no tuvieran sentimientos, necesidades y aprecios, pero para aquel entonces, ya era muy tarde. Lograron alcanzar la torre de control y encontraron al Dr. Euterodomo ahorcado. Miraron a través de las ventanas externas y observaron que el mundo fuera de allí, había desaparecido inmerso en un manto de cadáveres entrelazados de hombres y mujeres.

Se miraron lentamente, unieron sus manos y regresaron al Edén.