Las bodas más distinguidas

¿Busca una boda especial? Un faro, una ermita, el campo, una playa desierta... Cada vez son más las parejas que optan por un lugar exclusivo, original y diferente. Lo que se lleva ahora es el DIY (las siglas en inglés de Hazlo Tú Mismo), las búsquedas de información en blogs y foros, y no repetir el tipo de boda de amigas, hermanas o primas (incluido el espacio de celebración). Pensando en eso, Palacio de Montarco ha llevado a cabo una cuidada decoración del claustro y los jardines para habilitarlos como lugares adicionales a sus salones en la celebración de bodas. ¿La ventaja añadida? Su amplitud: permiten la celebración de bodas de más de 240 personas en un solo espacio y donde cada detalle se convierte en un auténtico sueño.

Según palabras de su directora Carmen García: "por un lado se ofrece a los novios la posibilidad de celebrar su banquete en el espacio más espectacular del Palacio y por otro lado se les permite que el banquete sea para más de 240 invitados en un único espacio".

"Todo en ese lugar es mágico", confiesan algunas de las parejas e invitados que han vivido la experiencia. "La noche y sus estrellas hipnotizan cuando los asistentes contemplan el cielo a través de su impresionante cúpula que, al caer la noche, hace efecto espejo y en ella se ven reflejadas cada una de las 400 velas que minuciosamente se distribuyen en las mesas y entre columna y columna del claustro. Es maravillosa la sensación de estar al aire libre rodeados de arte e historia", afirma Carmen García.

"En cuanto a los jardines, hemos dedicado mucho tiempo hasta encontrar una iluminación que llenara de magia el lugar, cuidando cada rincón, para darles opción de celebrar una boda distinta a parejas con más de cuatrocientos invitados".

Una sorpresa para los que se animen a elegir este paraíso cargado de sabor, historia, arte y distinción: los invitados podrán disfrutar después de la cena de diferentes espacios para el baile. Música más tranquila en los jardines y la música que los novios hayan elegido en la pista de baile.

A pesar de todo, uno de sus grandes atractivos es la delicada atención de su personal y los profesionales de prestigio internacional que se desplazan al Palacio, siempre pendientes de los deseos de los novios y de cualquier atención de los invitados, para hacer de su boda una boda inolvidable.

Un consejo: acérquense a verlo y no dejen de descubrir una de las joyas de Ciudad Rodrigo.