El encuentro terminó con empate y el disparo al palo de Jara en el último penalti decidió el pase a cuartos de final
Brasil consiguió clasificarse para los cuartos de final del Mundial de 2014 tras ganar a Chile en la tanda de penaltis (3-2) al haber empatado en los noventa minutos. La igualdad en ocasiones fue real y unos centímetros decidieron el ganador.
El ritmo fue muy alto desde el inicio. La Roja quiso demostrar más que nunca su presión y apretó en todo el campo. Sin embargo, la verdeamarelha no se dejó intimidar e hizo lo propio para poder igualar fuerzas y que todo fueran choques y errores en los pasos. Saltaron chispas, pero poco a poco se fueron relajando los dos combinados, siempre con atención a cada balón.
Los de Sampaoli, como es habitual, quisieron mandar, aunque siempre tenían dificultades. Las superaron y pudieron tocar, pero no encontraron profundidad. Un disparo desde la frontal del área de Marcelo y una llegada de Vargas sin buen remate fueron las primeras ocasiones, poco claras para ambos. Julio César y Claudio Bravo empezaron a actuar en centros laterales, armas de sus rivales.
A los veinte minutos hubo un cambio inesperado. Un córner botado por un activo Neymar terminó con Thiago Silva prolongando en el primer palo y Mena metiendo el balón en su portería al intentar despejar (1-0). Fue el momento para que los de Scolari guardaran aún más los muebles y se refugiarán atrás, algo que no rechazó su rival y provocó más acercamientos poco peligrosos.
Con esta dinámica llegó el empate. Un robo en un saque de banda fue aprovechado por Alexis Sánchez, que recibió en el corazón del área y la mandó al fondo de la red con potencia (1-1). Pese a ello, pronto llegó la réplica. Neymar cabeceó un centro lateral y se encontró la testa de Jara, providencial para desviarla cuando iba a puerta. Asimismo, un disparo lejano de Alves obligó al guardameta a tirar de reflejos para irse al descanso igualados.
Sentó mejor el parón a Chile. Salió convencido de sus posibilidades y volvió a dominar gracias a los rápidos robos de balón y a ganar cada balón dividido. La posesión era suya y en defensa no había fisuras que dieran sensación de peligro. Así, Brasil quiso quedarse atrás, defender en bloque y esperar la velocidad en algún pase largo, algo que no llegaba pese a la insistencia.
Aránguiz tuvo una gran opción de anotar tras llevarse un balón cerca del área rival, pero reaccionó bien el portero a su ajustado disparo. También Fernandinho, en una acción similar, estuvo cerca de adelantar a los suyos. El que lo hizo fue Hulk tras rematar un pase lateral, pero su gol fue invalidado por controlar con la mano. Había alternativas.
Empezó a combinar el cuadro chileno, que estaba cómodo sobre el césped y no se impacientaba por no ver portería con facilidad. Nuevamente Aránguiz, muy participativo, gozó de una excelente oportunidad en una dejada de Vidal que remató a bocajarro y salvó Julio César. Y volvieron a aprovechar una arrancada por banda los brasileños, pero no llegó a rematar Jo por centímetros. Se crecían sin balón y empezaron a encontrar algunos espacios.
Con la igualada, los dos decidieron no arriesgar demasiado y bajó la intensidad ofensiva. La pegaba mandaba. Ahí apareció Hulk, en una excelente actuación, para mandar un zapatazo que tuvo que sacar con dificultades Claudio Bravo. El miedo llegó y también la prórroga, puesto que no se había podido decidir el ganador en los anteriores noventa minutos.
La selección brasileña quiso ser protagonista en la reanudación. Sorprendió al mostrar más intensidad y disfrutar con balón, consiguiendo casi encerrar a un oponente que no supo salir de su área con el cuero controlado y que no pudo contactar con los atacantes. Pese a ello, tampoco sufrió en exceso atrás, sólo teniendo que tapar dos disparos peligrosos de Neymar y Hulk en los primeros quince minutos.
Despertó para el final la selección chilena, más metida en el choque. Volvió a establecerse igualdad y dejaron de verse opciones. Lo más destacado eran algunos chuts desviados desde lejos de Dani Alves y Marcelo Díaz, ambos demasiado altos. Y Pinilla la tuvo. El delantero, con una pegada desde la frontal, la mandó al larguero con una potencia brutal, aunque no tuvo suerte. También se fue por poco un último tiro de Ramires. Los penaltis tuvieron que decidir.
Fue primero David Luiz y marcó al engañar al portero (1-0). Pinilla lanzó al centro y atajó el cancerbero. Willian la mandó a la derecha de la portería. Alexis Sánchez la clavó abajo y detuvo el guardameta. Marcelo tiró al centro y anotó pese a tocar Bravo (2-0). Aránguiz la marcó tras tirarse Julio al lado contrario (2-1). El chut centrado de Hulk se topó con los pies del meta. Marcelo Díaz acertó por el medio (2-2). Neymar marcó con serenidad (3-2). Jara la estrelló en el palo. Chile perdonó y Brasil ganó.
Brasil (1(3)): Julio César; Alves, David Luiz, Thiago Silva, Marcelo; Luiz Gustavo, Fernandinho (Ramires, min. 72); Hulk, Oscar (Willian, min. 105), Neymar; Fred (Jo, min. 64(.
Chile (1(2)): Claudio Bravo; Isla, Silva, Medel (Rojas, min. 107), Jara, Mena; Aránguiz, Marcelo Díaz; Vidal (Pinilla, min. 87); Alexis Sánchez, Vargas (Gutiérrez, min. 57).
Goles: 1-0, min. 20, Mena (p.p.). 1-1, min. 34, Alexis Sánchez.
Árbitro: Howard Webb (ING). Amonestó a los brasileños Dani Alves, Luiz Gustavo y Hulk y a los chilenos Silva, Mena y Pinilla.
Incidencias: Partido correspondiente a los octavos de final del Mundial de 2014 disputado en el Estadio Mineirao.