Sencillamente nos mintieron

Vivimos unos tiempos de locos, en los que solo vale el parecer, pero no el ser; en los que funciona el decir, pero no el cumplir; en los que la inconsistencia, la falta de preparación y de seriedad conforman el aire irrespirable del que nos toca subsistir.

Cuando el PP estaba en la oposición afirmaba que sabían muy bien lo que se tenía que hacer para que salir de la crisis y prometían bajadas de impuestos, ayudas a las empresas, etc. y, cuando llegaron al gobierno, hicieron justo lo contrario. Afirmaban que tenían estudiada y preparada la reforma de la Administración pública para hacerla más eficaz, más ágil y vamos ya para 3 años y nada de nada. Es decir, por más que ellos afirmaban estar preparados para gobernar ni lo estaban, ni sabían cómo hacerlo, ni tenían claras las medidas que tenían que tomar o, sencillamente, nos mintieron.

Ahora, se afirma que ya se sabía que el Rey Juan Carlos tenía la intención de abdicar y sabían cómo tenían que actuar, que pasos tenían que dar y cuáles eran los modos de hacer las cosas; pero, lo cierto y verdad es que todo han sido dimes y diretes, actuares y procederes incongruentes, para acabar haciendo las cosas mal, en solitario, sin consistencia y dando una imagen de improvisación absolutamente deleznable, lo que vuelve a poner de manifiesto que ni sabían cómo hacerlo, ni tenían claros los medios y remedios por los que actuar, ni estaban preparados para ello o, sencillamente, nos mintieron.

Cuando, por ejemplo, se nos subieron los impuestos, se nos dijo que se bajarían en el momento que se pudiera y, ahora, nos venden que están cumpliendo, cuando ni siquiera nos están devolviendo al nivel que teníamos cuando ellos llegaron. ¿Será que eso es bajar los impuestos? ¿Será que no pueden o no quieren bajar los impuestos? O ¿será que no saben hacerlo? Es decir, ni saben, ni pueden, ni están preparados o, sencillamente, nos mienten.

Cuando se promulgó la Ley de Tasas, limitadora y cercenadora de los Derechos de los ciudadanos y de su acceso a la Justicia, se nos dijo que era momentáneo, que servía para cubrir los costes del sistema de la Justicia Gratuita y seguimos con ella a cuestas. Se ha reconocido que era recaudatoria y no sirve para lo que se decía que servía, se quitan las tasas en los países que las tenían y aquí seguimos con ellas; se negó la vulneración y limitación de Derechos y? o no saben, o no pueden, o no están preparados para ello o, sencillamente, nos mienten.

Un gobierno, y un partido, en el que hay tanto presunto Registrador, Abogado del Estado, funcionario de altísimo nivel, catedráticos, etc. y cada vez que se enfrentan a un problema en el que se tiene que aplicar lo prometido, hablar claro, ser coherente y actuar con lógica buscando la solución sin perjudicar a nadie; en definitiva, demostrar la consistencia que se debería de tener por la cualificación de la que se hace gala, o no saben, no pueden o no están tan preparados o, sencillamente, se nos miente.

Los "perritos sin alma" no queremos tanta preparación, tanta consistencia, tanta prepotencia y altanería, sino personas que demuestren lo que efectivamente son, que nos miren a los ojos y nos digan lo que piensan para después no hacer lo contrario de lo manifestado. Queremos gente que, sin tanta filfa o fanfarria, actúe, se equivoque, pida perdón y demuestre que saben lo que hacen, que pueden hacer lo que dicen, que están preparados para ello y, sencillamente, que no nos mientan.