Hace unos días una noticia ubicada en la peligrosa Pakistán sacudía los informativos y noticieros en su multitud de canales formas y maneras: un ciclista español había intentado ser secuestrado por guerrilleros talibanes que operan (la palabrita da al asunto un barniz "laboral" llamativo) en la zona o terroristas o bandidos o traficantes o?. llámalo X, mientras intentaba atravesar una zona muy peligrosa por ataques, secuestros, asesinatos, robos? llámalo X en una nación de una estructura social poco más o menos comparable al salvaje oeste, que dicen. Pero el asunto no es ese, el tema es que a este "rutero pedalero" le asignó el gobierno paquistaní un grupo de seis guardaespaldas para que le protegieran en su viaje por tierras que son algo parecido a campos minados. Y en la emboscada que les tendieron los asaltantes murieron los seis guardaespaldas del intrépido ciclista español. Es lo que se llama toda una masacre. Al hilo de esta noticia tan extraña, uno se hace varias preguntas. ¿Cómo es que tenía este tipo una escolta tan numerosa? ¿Si me aventurara yo por aquellos idílicos paisajes me diría el gobernador de la zona: " usted tranquilo vaya por donde quiera pero aquí le pongo yo un puñado de "gorilas" por si las moscas que usted no conoce el percal y nosotros sí"? ¡Coño, cuánta generosidad! La vida le dio al paisano.
Y otra cosa, yo no sé que decisión habrá tomado este respetable aventurero de dos ruedas, pero ¿serían ustedes capaces de continuar una empresa de esta magnitud llevando sobre la conciencia seis cadáveres así, todos de golpe?
También me pregunto si será presentable aventurarse por países donde según que zonas el personal tiene escaso conocimiento o ningún respeto por la vida humana ( de hecho las oficialías no recomiendan ir por allí a repartir sonrisas y buen rollo) Dejarse ver en plan "Verano azul". Digo yo que por muy nobles y humanitarios que sean los objetivos parece asunto de inconsciente y temerario camicace. Un amigo mío cuando veía venir un peligro seguro empleaba un aserto diabólicamente descriptivo, "date por jodido", decía. Una cosa si es cierta: ¡pedazo de libro le va a quedar al tipo!