Gracia Sánchez: "La Medalla de Oro de Salamanca cierra una herida y reconoce a las heroínas anónimas de los años 70"

La entrega de la Medalla de Oro de la ciudad de Salamanca 2025 a la Asociación de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios se ha convertido en un acto de justicia histórica que cierra medio siglo de reivindicaciones. Gracia Sánchez, presidenta de la entidad y vinculada a ella desde hace 43 años, habla de este reconocimiento con la emoción de quien ve sanada una "herida latente": la falta de reconocimiento social que durante décadas sufrió este colectivo.

"Para mí este reconocimiento me llena de orgullo y satisfacción, porque es el premio de la ciudad de Salamanca a tantos y tantos años de lucha", ha asegurado Sánchez. La presidenta ha confesado que siempre tuvo una "espinita clavada" por la invisibilidad del ama de casa, una figura que, especialmente entre los años 1970 y 1980, sostuvo la estructura social sin recibir gratificación económica ni valoración pública.

Según ha recordado, aquellas mujeres fueron "verdaderos héroes administrando los ingresos económicos" en épocas de gran dificultad, además de asumir en solitario el cuidado de enfermos y mayores. Un sacrificio anónimo que ahora, en 2025, recibe el máximo aplauso institucional. un reconocimineto que reciben junto a la reconocida hematóloga María Victoria Mateos, con quien hablamos en este entrevista.

Una "válvula de escape" vital: el testimonio de las hijas

Más allá de la medalla, Gracia Sánchez ha destacado que la valoración más emotiva llega hoy a través de las hijas de aquellas primeras socias. Son ellas quienes le transmiten el impacto real que tuvo la organización en la salud mental y emocional de sus madres.

"Mi madre siempre nos decía que los mejores ratos de su vida los había vivido cuando salía con la asociación", le confiesan a menudo. La entidad funcionaba como una auténtica "válvula de escape" que permitía a las mujeres salir del ámbito doméstico, integrarse en la sociedad y volver a casa "renovadas" tras participar en excursiones, congresos o los tradicionales cafés coloquio. "Para mí, esa es la gratificación más grande que ha podido recibir la asociación", ha afirmado la presidenta.

La asociación, fundada en 1972, nació con el objetivo social de sacar a la mujer del hogar, pero su evolución fue rápida y contundente. Gracia Sánchez ha detallado hitos históricos que demuestran la influencia del colectivo en la vida pública salmantina:

• Juntas de Precios: A finales de los 70, las amas de casa ya formaban parte de las juntas de precios de los gobiernos civiles, "reivindicando la cesta de la compra", una lucha por los productos básicos que sigue vigente medio siglo después.
• Juntas Hospitalarias: Posteriormente, lograron representación en los órganos de gestión hospitalaria, ampliando su radio de acción a la sanidad.
• Ley de 1974: Con la aprobación de la primera ley de protección al consumidor, la entidad cambió sus estatutos para convertirse oficialmente en Asociación de Amas de Casa y Consumidores.

Este salto cualitativo fue posible gracias al apoyo de la Junta de Castilla y León, que financió la formación de funcionarios y miembros de la asociación. "Hicimos cursos de consumo y ellas mismas se preparaban para cuando tenían algún problema", ha recordado Sánchez. Aquellas mujeres de "mentes abiertas" sorprendían a la sociedad cuando exigían sus derechos con conocimientos técnicos, rompiendo los estereotipos de la época.

Gracia Sánchez ha aprovechado el galardón para reflexionar sobre la igualdad y el sacrificio intergeneracional. Ha recordado con amargura cómo muchas mujeres de su generación, pese a tener estudios de magisterio o enfermería, se veían obligadas a abandonar sus carreras al contraer matrimonio. "Era como un decreto: tenían que dejar sus ilusiones y proyectos para dedicarse en exclusiva a la familia", ha lamentado.

Por ello, la presidenta ha mirado con orgullo a su compañera de galardón, la investigadora María Victoria, a quien define como "una mujer del siglo XXI que ha podido llegar a lo más alto". Sánchez considera que las amas de casa fueron pioneras en trabajar por la igualdad precisamente para que sus hijas no sufrieran ese techo de cristal. "Querían que llegaran donde ellas no pudieron porque no les dieron oportunidades", ha sentenciado.

Crisis del voluntariado: de la tintorería a la ciberestafa

A pesar de la celebración, la entrevista revela una preocupación profunda por el futuro del asociacionismo de consumo. Gracia Sánchez ha explicado que la entidad siempre ha funcionado sin ánimo de lucro, manteniéndose con "pequeñas cuotas simbólicas" y el trabajo altruista de sus socias.

Sin embargo, el escenario actual ha desbordado este modelo. Las reclamaciones tradicionales, que antes se centraban en tintorerías, reparaciones de electrodomésticos o talleres de automóviles y se resolvían mediante conciliación, han desaparecido.

"Hoy la situación es alarmante: ciberestafas, teléfonos spam y compras por internet", ha advertido la presidenta. Sánchez ha sido tajante al afirmar que el voluntariado ya no es suficiente para enfrentar estos desafíos técnicos: "Necesitamos personal muy cualificado y, por supuesto, remunerado para poder hacer frente a estas situaciones".

Gracia Sánchez ha recogido la medalla "con mucha humildad", dedicándosela a todas las "heroínas anónimas" que pasaron por la asociación y que merecen, según sus palabras, "todo el cariño de la sociedad".