La iniciativa recauda fondos mediante donaciones de 5 euros, a cambio de luciérnagas artesanales hechas por los mayores, para comprar regalos de Reyes a niños de centros de acogida e hijos de víctimas de violencia de género
La Navidad en Salamanca suma una nueva propuesta altruista con el objetivo de que ningún niño se quede sin regalo el próximo Día de Reyes. La residencia CleceVitam San Antonio y la asociación Corazón y Manos han unido fuerzas para lanzar la campaña "Enciende una Luz", un proyecto que busca transformar la solidaridad ciudadana en juguetes e ilusión para los colectivos más desfavorecidos.
Esta acción se enmarca en la iniciativa más amplia "Los Reyes Magos de Corazón y Manos", destinada a cumplir los deseos de los más pequeños. El centro residencial se ha transformado este año en lo que han denominado una "Constelación CleceVitam", un espacio donde la decoración navideña cobra un sentido social y donde cada elemento simboliza una acción de ayuda.
Los interesados pueden realizar una donación mínima de 5 euros en la recepción de la residencia CleceVitam San Antonio. Como agradecimiento por este gesto, los donantes recibirán una luciérnaga artesanal.
Estas pequeñas piezas luminosas tienen un valor añadido, ya que han sido elaboradas a mano por las personas residentes del centro. Además de las luciérnagas, la decoración del espacio incluye un gran corazón creado por la gobernanta de la residencia y una nueva "Vela solidaria" diseñada específicamente para reforzar el mensaje de la campaña.
La recaudación íntegra se destinará a la compra de regalos de Reyes para dos grupos de menores en situación de vulnerabilidad: a niños y niñas que residen en centros de acogida gestionados por la compañía Clece así como a hijos de trabajadoras de la empresa, muchas de ellas mujeres que han sufrido violencia de género.
Desde la asociación Corazón y Manos, entidad declarada de Utilidad Pública en 2021, destacan la importancia de la colaboración ciudadana: "Con tu ayuda, conseguiremos que la mañana del 6 de enero sea mágica para todos los niños".
Más allá de la recaudación económica, el proyecto tiene un fuerte componente de integración y participación para los usuarios de la residencia. La elaboración de las artesanías les permite ser agentes activos de la solidaridad.
"Para nuestros mayores, crear estas luciérnagas no es solo una manualidad: es una forma de sentirse parte de algo grande, de regalar ilusión a niños que lo necesitan", ha asegurado Estíbaliz De Frías, directora de la residencia CleceVitam San Antonio. Según la responsable del centro, "cada luz que entregamos lleva un pedacito de su corazón".
La iniciativa, que ha comenzado en Salamanca, tiene previsto extenderse a otras zonas para que compañeros de Valladolid y otras ciudades puedan sumarse a esta cadena de solidaridad navideña.