La 'Tarde Cultural en las Tierras del Oeste Salmantino' llenó el salón de actos del Centro Cultural e incluyó la proyección de un cortometraje, un monólogo de humor y una obra de teatro, reivindicando el acceso a la cultura en el medio rural
El salón de actos del Centro Cultural de Vitigudino ha sido el escenario elegido este domingo para la celebración de la 'Tarde Cultural en las Tierras del Oeste Salmantino'. Esta iniciativa, impulsada conjuntamente por los grupos de acción local Adezos, Adrecag y Adecocir y financiada por la Diputación de Salamanca, ha ofrecido una programación multidisciplinar que ha combinado la proyección audiovisual, el monólogo cómico y las artes escénicas con el objetivo de dinamizar la vida cultural de la comarca.
La jornada ha registrado una notable afluencia de público que ha ido de menos a más hasta llenar el recinto, demostrando el interés de los vecinos por este tipo de propuestas. El acto inaugural ha corrido a cargo del presidente de Adezos, José María Herrero, quien ha destacado durante su intervención la importancia de que la zona rural no solo se centre en la atracción de nuevos pobladores, sino también en garantizar el acceso a la cultura "como todos los demás". Herrero excusó inicialmente la ausencia del alcalde de Vitigudino, Javier Muñiz, aunque el regidor se sumó posteriormente al desarrollo de la gala.
La programación, cuyas actuaciones fueron introducidas por la vicepresidenta de Adezos, María del Mar Sánchez, comenzó con un homenaje visual a la tierra. Se proyectó el cortometraje titulado Las Tierras del Oeste Salmantino. ¡Salud, libertad, posibilidades, vida!, un trabajo dirigido por Heidi y Nikko Norte. Esta pareja de origen holandés, residente actualmente en La Zarza de Pumareda, ofreció a través de la pantalla su particular visión sobre las bondades de la comarca.
La pieza audiovisual refleja la experiencia inmersiva de sus autores y la sorpresa de la mirada extranjera al descubrir personajes, costumbres y paisajes que distan mucho de los tópicos habituales. Cabe destacar la singular trayectoria de Nikko Norte, quien, tras una vida ligada al ejército en los Países Bajos y una faceta viajera, terminó adentrándose en el mundo de la tauromaquia en España, adoptando su apellido artístico actual, para dedicarse posteriormente a la escritura con una fuerte carga autobiográfica.
Tras el pase cinematográfico, el tono de la velada giró hacia la comedia con la intervención de la artista Asun Serra. La humorista, actriz y locutora conquistó a los asistentes con su monólogo Moderna de pueblo, una intervención cargada de ironía y energía que hizo reír al público de principio a fin. Serra ofreció una perspectiva desenfadada sobre la vida cotidiana de la mujer rural, analizando con agudeza cómo son vistos los habitantes de los pueblos desde los grandes núcleos urbanos y desmontando los malentendidos habituales sobre el turismo rural.
El broche final a la jornada lo puso la representación teatral de la obra Sin reservas, una producción conjunta de la compañía Unión Teatro y Edulogic Producciones. La puesta en escena contó con las interpretaciones de Raquel G. Sevillano, Edu Joaquín, Carlos Vicente y Patricia Sánchez, quienes dieron vida a tres historias entrelazadas por un mismo hilo conductor: la decisión de Ernesto, un emprendedor soñador, de abrir un restaurante en un pequeño municipio.
La obra, que narra cómo el protagonista es tildado de loco por apostar por un negocio en la llamada España vaciada, resonó especialmente entre el público asistente. A través de una comedia llena de ternura y humor, la función abordó temas universales como la amistad, el amor y las segundas oportunidades, lanzando un mensaje final de optimismo sobre las posibilidades de desarrollar proyectos vitales y sueños en el entorno rural.