El director provincial de Educación asegura que el Colegio “no tiene cupo” ya que en el período de matriculación sólo se ofertaron 22 plazas
La reivindicación por parte de la Asociación de Madres y Padres de Alumnos del Colegio Miróbriga de Ciudad Rodrigo de desdoblar el único aula de 3 años con el que cuenta el centro (admitiéndose la matrícula de dos gemelos de esa edad, que quieren cursar la enseñanza British que sólo se imparte en este Colegio) ha dado esta semana el salto ante la administración de la que depende la decisión, la Junta de Castilla y León, que la sigue rechazando.
Por un lado, el asunto fue planteado en la jornada del martes en las Cortes de Castilla y León por el procurador socialista Fernando Pablos, quién en pleno hemiciclo autonómico explicó al resto de procuradores la situación, como uno de los ejemplos de mala gestión educativa en la región frente a la “autocomplacencia absoluta” de la consejera del área. Al respecto de esta “grave” situación, Fernando Pablos resaltó que la Junta lo hace “para ahorrar dinero”, preguntándose si “la libertad de elección de familias es sólo para los colegios concertados”.
Por otro lado, en la mañana del miércoles integrantes de la AMPA del Colegio Miróbriga mantuvieron una reunión, acompañados por el director del centro, José Manuel Herrera, con el director provincial de Educación, Ángel Morín, quién mantuvo la negativa a la matriculación de los dos alumnos en el Colegio Miróbriga (han sido derivados al Colegio San Francisco).
Según explica la AMPA en una nota de prensa, Ángel Morín alegó en la reunión que el Colegio Miróbriga “no tiene cupo” para poder matricular dos alumnos más, ya que en el período de matriculación sólo se ofertaron 22 plazas para el 1º curso del 2º ciclo de Infantil, que ha iniciado el curso con 21 alumnos.
Respecto al derecho de la familia a elegir centro dado el distrito único, “especialmente teniendo en cuenta su deseo de mantener a sus hijos en el Programa British”, Ángel Morín les dijo que la elección de idioma “es simplemente una preferencia y no un derecho”, por lo que “no es motivo suficiente para respetar la decisión de la familia sobre la educación de sus hijos”. Para la AMPA, esta situación “viola las libertades y derechos de la familia a tomar decisiones esenciales sobre la educación que quieren dar a sus hijos”.
Por otro lado, la Dirección Provincial de Educación también mantiene su negativa a aumentar el personal de apoyo “pese a la situación que ya sufre el Colegio Miróbriga y pasará a sufrir el Colegio San Francisco”, alegando en este caso que “la normativa lo impide y no se pueden hacer excepciones”. Para la AMPA, lo que ocurre es que “no hay voluntad de invertir más en la educación de nuestros hijos, ni de garantizar los servicios más básicos en sitios como Ciudad Rodrigo”.
La AMPA resalta que Ciudad Rodrigo “sufre las consecuencias” de las normativas y políticas de una Junta de Castilla y León que “claramente se olvida del medio rural, debilitando sus servicios públicos”. Obviamente, la AMPA muestra su “absoluto rechazo” a la decisión de la Dirección Provincial de Educación, anunciando que continuará exigiendo “el aumento de medios y personal” que permitan “una verdadera educación pública de calidad”.